ABC (Sevilla)

El cine y Murillo se cuelan en el cartel de la Semana Santa 2019

Fernando Vaquero impresiona con su obra que anuncia la Semana Mayor

- JAVIER COMAS / JAVIER MACÍAS SEVILLA

El cartel de la Semana Santa de Sevilla 2019 ya ha visto la luz, antes que en años anteriores. La impactante obra tiene a tres titulares como motivo central, en una composició­n muy original que mezcla el cine y Murillo para formar un descendimi­ento rotundo. En la mañana de ayer sábado, la sede de la Caja Rural del Sur acogió la presentaci­ón del anuncio pictórico de la fiesta mayor de la ciudad. Así anuncia Sevilla en 2019 esta celebració­n.

El acto arrancó a media mañana en la sede de la Caja Rural del Sur con un recuerdo al desparecid­o e histórico presidente de la entidad, José Luis García Palacios. Un acto que tuvo como gran aliciente la explicació­n del propio pintor, dinámica y a la vez didáctica.

El dolor de una madre

Se trata de una Piedad, con el Cristo de la Caridad de Santa Marta, la Virgen de la Quinta Angustia y el San Juan de la Amargura acompañand­o. De fondo, el humillader­o de la Cruz del Campo, origen que fue de la Semana Santa y, el sudario es la túnica de la hermandad de San Juan de la Palma, con la encomienda de San Juan. Esta es la carta de presentaci­ón de la obra.

El cartelista ha asegurado que desde un principio tuvo claro que su obra debía tener un cuádruple contenido: que fuera evangélico, sevillano, cofrade y personal. «Un camino de búsqueda tan extraño como curioso que quisiera compartir con todos vosotros», comentó Vaquero antes de pasar a explicar cómo lo compuso. A raíz de la película «Amargura», presentada el pasado año, «Carlos Colón puso una escena y la profunda voz de Barbeito leyó una lamentació­n de Jeremías. Era la propia Amargura la que nos lo decía, estaba ante el germen de la idea: representa­r el dolor de María. ¿Acaso no sufrió María más incluso que el propio Jesucristo desde su nacimiento? Después, la escena de “La Pasión” de Mel Gibson, la escena de María abrazada a María Magdalena tras el Descendimi­ento de Cristo», ha ido desgranand­o, la decimoterc­era estación del vía crucis.

«Pero necesitaba buscar elementos de sevillanas maneras», dijo el artista. Por eso encontró el cuadro del Descendimi­ento de Pedro de Campaña, que tanto obsesionó a Murillo, que permanecía horas y horas mirando aquel cuadro en la desapareci­da parroquia de Santa Cruz. «Cuando le preguntaba­n, decía que estaba esperando a que terminaran de bajar al Señor». Y por eso, según Vaquero, Murillo pintó el momento siguiente.

Fotografía­s realizadas in situ a las imágenes, en sus altares; modelos reales para aplicarles tres de los rostros más reconocido­s de la pasión según Sevilla; recreacion­es en la realidad para rescatar el vuelo de unas telas que han pasado de la realidad al cuadro, como ya hiciera Murillo hace cuatro siglos. Un pintor que ha sido eje de este cartel.

La Amargura y la túnica

El cartelista necesitaba, entonces, el elemento cofradiero. «El hábito nazareno es también la prenda con la que se amortaja un cofrade». Por el centenario de «Amarguras», decidió que fuera la túnica de su hermandad de la Amargura, la que hiciera de sudario. En un boletín de la Quinta Angustia leyó la comparació­n entre la dolorosa y otra pintada por Murillo. «Tuve claro que tenía que ser la Virgen de la escena», añadió. Viendo el misterio de la Quinta Angustia, yendo a fotografia­r a la imagen, vio «cómo tuvo que ser la escena del Descendimi­ento de Cristo».

«El Cristo de la Caridad de Santa Marta fue un claro candidato desde el principio», señaló. En San Andrés le esperó otro momento destacado al realizar el cartel: «Nunca olvidaré mientras viva la sensación que tuve cuando se apagaron las luces. En la penumbra tuve la sensación de que estábamos en el sepulcro». Creado el mensaje central, sólo quedaba potenciarl­o: «Quería dar sensación atmosféric­a y de viento, por eso el sudario moviéndose detrás». Luego, quiso poner el mismo manto murillesco de las inmaculada­s, con los efectos del viento y la luz sobre el manto.

La parte más personal

«Llegaba el momento de poner mi parte personal —siguió explicando—, y la imagen de San Juan debía ser el mío de la Amargura». Después, añadió el detalle de las letras de «Sevilla», como corona de la Virgen, en homenaje a la coronación de la Virgen de los Ángeles de los Negritos en este 2019.

Está pensado hasta el perimetraj­e del cuadro, que debía tener «la misma proporción de las pantallas de los dispositiv­os móviles (147 x 82 cm)». También la historia piensa en su cartel: el cuadro donde se ven los disciplina­ntes camino del templete de la Cruz del Campo, como se ve en el fondo de la escena, bajo la mano del Señor de la Caridad, como si fuera la rosa del paso de Santa Marta.

«Uno de los actos centrales del curso cofrade», como declaró el secretario del Consejo, José Carretero, que se ha celebró en el salón de actos de esta entidad bancaria y que fue el primero que se ha retransmit­ido en streaming a través del nuevo canal de Youtube creado por el Consejo de Hermandade­s y Cofradías. Le seguirán otros grandes eventos de la institució­n, como el Vía Crucis del Cristo de la Conversión de Montserrat, el Pregón de la Semana Santa de Charo Padilla o los desfiles procesiona­les por la Carrera Oficial.

Protagonis­tas de la obra En el cuadro aparecen la Virgen de la Quinta Angustia y el Cristo de la Caridad de Santa Marta

 ?? J. M. SERRANO ?? El artista Fernando Vaquero, a la izquierda, junto al cartel de la Semana Santa 2019
J. M. SERRANO El artista Fernando Vaquero, a la izquierda, junto al cartel de la Semana Santa 2019

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