El distrito portuario echa a andar con la adjudicación de la nueva terminal de carga
El muelle de Tablada se empezará a liberar en dos años para ser una zona de ocio
Las empresas Ership y Portillo, propietarias de la sociedad Almacenes y Depósitos Portuarios (Aldeport), construirán la nueva terminal de carga en la Dársena del Cuarto. El Puerto de Sevilla le ha adjudicado una concesión para el desarrollo de este proyecto, que será el germen del nuevo distrito urbano que se extenderá por el muelle de Tablada y que permitirá recuperar las naves regionalistas de la avenida de Las Razas.
El presidente de la Autoridad Portuaria, Rafael Carmona, hizo ayer el anuncio y ofreció detalles de esta nueva terminal en la que ambas compañías invertirán 5,4 millones de euros para acondicionar una explanada de 25.000 metros cuadrados, que dispondrá de un muelle de carga de 150 metros con dos grúas para la operativa. Está previsto que en este nuevo espacio se puedan cargar dos buques a la vez con la incorporación de dos pilonos, del tipo «duque de Alba», que permitirán aumentar la capacidad.
El máximo responsable del Puerto avanzó que las obras comenzarán a finales de este año, lo que permitirá tener las instalaciones en servicio en 2023. «A partir de ese momento, la actividad que esta empresa realiza en Tablada se trasladará a la Dársena del Cuarto, que es el lugar que hemos definido para reubicar los trabajos portuarios, al encontrarse dentro del anillo ferroviario y cerca de la nueva conexión con la SE-40 y la salida a la SE-30».
El desarrollo de la Dársena del Cuarto no empieza con esta nueva terminal, pues Ership y Portillo tienen allí operativas otras dos naves de 5.000 metros cada una y junto a ellas opera con normalidad la terminal de líquidos que gestiona la empresa Servitrade en una superficie de más 55.000 metros cuadrados.
El objetivo es que todos los operadores que utilizan el muelle de Tablada terminen abandonándolo para que empiecen a desarrollarse los nuevos usos comerciales, hosteleros y administrativos que hay previstos. En el rediseño de todo el espacio ya trabaja la oficina técnica que gestiona el estudio sevillano Eddea, Arquitectura y Urbanismo, S.L.P., al que le queda todavía un largo trabajo por delante de al menos tres años para redactar la hoja de ruta.
La integración en la ciudad del muelle de Tablada supone recuperar tanto las naves y los tinglados portuarios como la avenida de Guadalorce, que discurre por el interior y que siempre ha estado cerrada al público. La intención es llenar de actividades de ocio, comerciales y de oficinas todo el espacio hasta el mismo cantil del muelle, que albergará también una nueva terminal de cruceros y más amarres para grandes yates.
Las empresas Ership y Portillo construirán la terminal que requiere de una inversión de 5,4 millones de euros
El polígono Astilleros sigue creciendo con el centro de innovación y una nueva empresa que se instalará allí
El desarrollo llegará igualmente a los terrenos situados en la acera opuesta de la avenida de Las Razas que son propiedad del Puerto, aunque no están afectados por el régimen de dominio público portuario. Por eso mismo se pueden subastar, una operación que se llevará a cabo a lo largo de este año y que la Autoridad Portuaria ha venido retrasando por el impacto que la crisis sanitaria tiene en el mercado inmobiliario. En esa parte, donde ahora hay varias naves de almacén, un concesionario, un supermercado y un aparcamiento se espera instalar un polo de empresas tecnológicas y edificios de uso terciario que revitalice toda la zona.
Durante su intervención el presidente recordó que con estos pasos que se han dado «se inicia el camino ha