Sutilezas del Barroco inglés
La soprano estará con la OBS en el teatro de la Maestranza el sábado
—Una nostalgia bella, incluso cuando se trata de una pieza alegre. El grado de delicadeza y profundidad es realmente grave. Todo es evocador. Los ingleses fueron muy protectores con su Barroco, no recibió tantas influencias de fuera como sucedió, por ejemplo, en España, donde lo italiano tuvo más fuerza. En el Renacimiento español hubo una hondura muy auténtica que se perdió en el Barroco. Dejamos de tener algo tan propio. Lo que pasó en Inglaterra es que se protegió más la cultura nacional. Se mantuvo esa racionalidad, aunque lo italiano también entrase.
—¿Algún compositor por el que tenga especial predilección?
—Bach, sin duda.
—Eso no es original... ¿Y de los británicos a los que va a interpretar?
—Ahí coincidimos la mayoría... El que más me apetece de esos es Purcell. Es al que menos estoy acostumbrada. Tiene una calidad elevadísima.
—¿Siempre tuvo claro que quería dedicarse a esto?
—Yo quería ser bailarina o astronauta hasta que profundicé en la música de Bach. De hecho, estudié ballet antes que violín. Tuve mala suerte con un profesor que practicaba el maltrato físico y mi madre me quitó. Pero descubrí autores que me encantaron desde muy pequeña. Luego entré en el conservatorio y todo fue sucediendo poco a poco. —Domina repertorios desde el siglo XVI hasta la actualidad y ha formado su propio ensemble, con el que hace música con carácter historicista. ¿Qué repertorio se le antoja más estos días? —Lied alemán del XIX. Una canción lírica que estoy haciendo con mi grupo.
—¿Cuántos idiomas habla?
—Ese es mi punto débil. El oído de los idiomas debe ser diferente al musical. Puedo hablar inglés e italiano; entender y cantar también el francés y el alemán.
—No está mal.
—A ver si se salva la gira que tengo por Europa en otoño y practico. ¡Espero!
«Orpheus Britannicus»
Σ Teatro de la Maestranza. Mañana a las 12 horas. Entradas: desde 26 euros. Más info. en www.teatrodelamaestranza.com