Sueños imposibles
Andalucía, he querido recordar el recinto que tuvo tanto éxito durante la Expo´92 , conocido como ‘Andalucia de los niños’, que recreaba en un espacio de 10.000 m2 lo que era nuestra comunidad autónoma en distintos monumentos representativos, después de muchos años de abandono en el año 2.016, la Consejería de Hacienda y Administración Pública adjudicó la concesión administrativa para la explotación del espacio a Kosmoarte-Barqueta S.L. por un periodo de 20 años, comprometiéndose esta empresa a rehabilitar todas las maquetas en un plazo de 5 años, va a cumplirse el plazo y allí no se ve actividad de ningún tipo. La obra se debió en su día a Ignacio Aguilar, arquitecto de Marchena, y tuvo un coste de casi 800 millones de pesetas y ahora lo único que se puede apreciar, a través del vallado, son restos de algunos monumentos, vegetación salvaje y algo más que queda en el olvido.
Todos los partidos políticos que dicen defender la unidad de España, la Constitución, el Ordenamiento Jurídico vigente, y a las víctimas del terrorismo, deberían acordar unas bases comunes, para propiciar el bienestar de la Nación y de todos los españoles, y negociar y pactar con el Gobierno suprimir el lastre de los comunistas bolivarianos antisistema y utópicos, que nos cogobiernan, para formar un gobierno monocolor, inspirado en la social democracia. Dicho pacto, garantizaría el normal desarrollo de un Gobierno del PSOE, toda la Legislatura, con apoyos externos. Renovar órganos y dirigentes CGPJ, el TC, el Defensor del Pueblo, RTVE. Nombrar nuevo Fiscal General del Estado a un cualificado miembro de la carrera, sin adscripción política, al igual que a un nuevo responsable del CIS, independiente y cualificado sociómetra. Pactar normas sobre Educación, Sanidad y Pensiones, que no enfrenten a unos con otros. Crear un marco jurídico que propicie la salida del bache económico y que las empresas creen puestos de trabajo. Elaborar medidas para minorar el Déficit y la Deuda Pública, y efectuar una gestión transparente y eficaz de los fondos para la reconstrucción, procedentes de la Unión Europea. Por último, suprimir la «mesa de negociación» con quienes pretenden incumplir las leyes en Cataluña, y negociaciones con luz y taquígrafos en los parlamentos catalán y español, que es donde reside la soberanía nacional.
JAVIER MORENO MIURA