El caos en el canal de Suez pone en alerta al sector logístico sevillano
Las empresas temen retrasos más adelante si no se agiliza el atasco de buques
El reflote del buque encallado en el canal de Suez no despeja los problemas para el sector logístico que teme retrasos en la recepción de mercancías y un encarecimiento de precios. El incidente que mantiene el jaque al comercio mundial no ha tenido, por el momento, una gran repercusión en el Puerto de Sevilla, cuyo tráfico de contenedores es de corta distancia, conocido como ‘short sea shiping’. Fuentes de la Autoridad Portuaria aclaran a ABC que hasta ahora «no se ha notado afección alguna, a diferencia de otros puertos próximos como el de Algeciras, porque no ha tenido impacto en la conexión con las Islas Canarias ni en las rutas con el norte de Europa».
Más preocupación muestran por las empresas instaladas en la Zona de Actividades Logísticas (ZAL) donde se encuentran algunos centros distribuidores como el de Decathlon o el de Leroy Merlin que, hasta ahora tampoco se han visto afectados, aunque eso no significa que pueda ocurrir en las próximas semanas. Menos comunicativos se muestran en Amazon, que abrió el pasado septiembre en Dos Hermanas el mayor centro logístico de España. Fuentes de la multinacional dicen no tener datos sobre el nivel de impacto que ha podido tener esta retención del tráfico marítimo en una ruta comercial tan destacada. Si lo ha habido, al menos no ha afectado al tránsito de camiones que entran cada día en el complejo del parque logístico Megapark, que sigue siendo el mismo que antes del incidente, como apuntan las empresas proveedoras de la compañía y alguno de sus trabajadores.
Por su parte, fuentes del sector logístico aseguran a ABC que aún es pronto para conocer el alcance, que «dependerá de la rapidez con la que se agilice la operativa de buques». Actualmente hay más de 400 embarcaciones a la espera de cruzar por este canal, algo menos de la mitad están en Port Said –en la costa mediterránea de Egipto– para el paso hacia la dirección sur y el resto se encuentra en Suez –en el mar Rojo– para dirigirse hacia el norte.
Problema a futuro
Las fuentes consultadas aseguran que «a pesar de que el carguero ha estado encallado apenas cuatro días y que ya se ha reflotado, la resaca de lo ocurrido durará meses, pues hay centenares de contenedores en tránsito que tienen que volver vacíos a Asia y eso no es tan sencillo». Aluden a toda la cadena logística desde la llegada a puerto de los cargueros a la operativa de descarga y transporte. «Irremediablemente nos encontraremos con una aglomeración de buques en Europa y las fábricas asiáticas sufrirán una escasez de contenedores, lo que seguramente encarezca los fletes», lamentan.
En todo caso, se muestran convencido de que tal vez «le estamos dando demasiada importancia al momento actual, pero el problema llegará más tarde, especialmente para los que tienen más dependencia de los productos fabricados en Asia como es el mercado textil o el de componentes electrónicos y de automoción».
La industria no lo nota aún
También había preocupación entre las industrias de transformación como la metalmecánicas que se encuentran instaladas en el polígono Astilleros. Sin embargo ninguna de ellas ha notado aún escasez de mercancías ni de materias primas. Así lo confirman a ABC responsables de Megusa, Tecade y GRI Towers que hasta el momento no notan impacto alguno. Y no es que no tengan dependencia del mercado asiático, sino que el incidente en el canal de Suez coincide con un momento de bajada en el ritmo de producción tras la entrega de últimos encargos. La crisis sanitaria generó el año pasado un retraso en las licitaciones públicas, lo que ha influido irremediablemente en la carga de trabajo prevista para este 2021. «Ojalá nos estuviera afectando», admitió ayer a ABC uno de los directivos de estas compañías que sigue a la espera de futuras contrataciones.
«Le damos importancia a lo que ocurre ahora, pero el problema va a llegar más tarde»