Enemigos incontrolables en la F1
El envoltorio de un sándwich atascado en el freno de su Alpine, causa del abandono de Alonso en Barhéin
Si existe un deporte con músculo económico, ese es sin duda el conglomerado de marcas y poderosos patrocinios que mueven la pasarela de la Fórmula 1. Últimos avances mecánicos, vanguardia tecnológica y millones de euros al servicio de escuderías que miman cada pieza hasta el límite y exprimen la preparación de sus pilotos para alcanzar el máximo rendimiento en sus monoplazas. Horas de desvelo y trabajo concienzudo que en carreras como la del domingo en Barhéin pueden saltar por los aires por un factor tan imprevisible como la presencia de restos de basura en el asfalto. En su esperado regreso a la F1 y según aseguró Marcin Budkowski, director ejecutivo de Alpine, Fernando Alonso se vio obligado a la retirada por un aumento de temperatura en los frenos traseros motivado por la presencia de un trozo de envoltorio de sándwich en un conducto. Un insignificante plástico fue capaz de detener a una poderosa máquina que vuela a más de 300 kilómetros por hora, aunque no es la primera vez que sucede.
Emocionado por su vuelta a los circuitos después de dos temporadas de ausencia en la Fórmula 1, Fernando Alonso desveló que los frenos fueron la causa de su abandono, aunque reconoció que su Alpine también había sufrido antes problemas con las baterías. El asturiano se bajó del coche en la vuelta 34, cuando ocupaba el puesto decimoquinto, aunque en algún giro llegó a pasar séptimo por meta. Su escudería confirmó las palabras del bicampeón mundial, asegurando que, durante la segunda y última parada para cambiar los neumáticos, «un papel de envoltorio de un sándwich se quedó atascado dentro del conducto del freno trasero del coche de Fernando». Marcin Budkowski, en declaraciones a la web oficial de la escudería francesa, ahondó en la explicación: «El papel provocó una alta temperatura y causó daños en el sistema de frenado, por lo que le dijimos que se retirara por motivos de seguridad».
Más damnificados
En el millonario negocio de la Fórmula 1, el presupuesto es el que marca la preparación y actualización de los monoplazas con la última tecnología, pero el domingo volvió a quedar de manifiesto que las escuderías no pueden escrutar y controlar absolutamente todo en este deporte. De hecho, no es la primera vez que un plástico arruina la carrera de un piloto. Le sucedió a Sergey Sirotkin (Williams) durante el GP de Australia que abrió la temporada 2018 y la escena volvió a repetirse un año después en Singapur con el abandono de Kevin Magnussen. Este domingo le tocó al piloto español. «Fue una muy mala suerte para la primera carrera de Fernando, teniendo en cuenta lo bien que había ido», lamentó el director ejecutivo de Alpine en sus declaraciones.
Antes de este incidente desgraciado con el envoltorio del sándwich, la carrera ya no pintaba bien para un Fernando Alonso que salió noveno desde la parrilla y fue de más a menos hasta la retirada, superado ya el ecuador del GP de Barhéin. Según afirmó el asturiano, «antes tuvimos algún problema con las baterías», lo que obligó a los ingenieros de la escudería gala a reducir el rendimiento del coche. Un lastre que confirmó Budkowski, aunque sin aclarar el motivo que dio origen a ese problema.