España encara la cuarta ola sin ver aún el impacto de la Semana Santa
Fernando Simón avisa de que «la variante británica ya es nuestra variante»
ciarse como eficaz contra el Covid-19, aunque desde un principio ha estado rodeada de un halo de controversia, dada las reticencias de sus creadores de facilitar a la comunidad científica internacional los detalles pormenorizados de sus pruebas y la rapidez con que fue registrada y dispensada entre la población. Sin embargo, el pasado 2 de febrero recibió un considerable espaldarazo al ser catalogada como «segura» y «efectiva» por ‘The Lancet’.
Desarrollada en el Centro Nacional de Epidemiología y Microbiología Gamaleya de Moscú, los derechos de la Sputnik están en manos del Fondo Ruso de Inversiones Directas, de titularidad pública, entidad soberana que financió su desarrollo, producción y comercialización. La capacidad rusa para producir la vacuna en cantidades millonarias es limitada, de ahí que estén explorando acuerdos de cooperación con laboratorios en el extranjero, como el caso de Zendal. En la actualidad, Sputnik está siendo dispensada en Hungría, México, Argentina o Chile; Eslovaquia ya ha cerrado la compra de dos millones de viales y Austria negocia adquirir un millón, sin esperar a la autorización de la EMA.
La transmisión del virus sigue al alza. Con 163 positivos por cada cien mil habitantes, doce puntos más que el pasado sábado, España encara la cuarta ola sin conocer aún el impacto que la Semana Santa podría tener sobre los contagios. Según precisó ayer el director del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias (CCAES), Fernando Simón, las consecuencias de la mayor movilidad durante los festivos no se notarán «hasta finales de esta semana».
Durante su habitual comparecencia para dar cuenta de la evolución de la pandemia, Simón explicó que todos los indicadores, salvo el número de fallecidos, están al alza. En los últimos días han aumentado entre dos y tres puntos diarios la tasa de contagiados por cada cien mil habitantes, ha crecido la ocupación de las camas hospitalarias y se ha elevado el porcentaje de positividad de los test que se realizan.
«En una semana hemos pasado del 5,3 al 7 por ciento de pruebas positivas. La tendencia es suave pero es ascendente», aseveró el epidemiólogo, quien alertó de que las cifran podrían subir los próximos días y poner a España en «una situación complicada» debido a que «muchas personas no