El papel de Sevilla
La empresa Pagés ha suspendido la Feria de Abril porque la Junta no le permite el 50 por ciento del aforo: «En un pueblo se pueden dar corridas para mil personas; en Sevilla, no»
SU decisión de suspender la Feria de Abril de Sevilla ha generado división de opiniones. El sector es muy crítico con los dirigentes políticos que obligan a mantener un metro y medio entre cada espectador en los tendidos, algo que no se exige en otros espectáculos, pero muchos también creen que la empresa tendría que haber sido más flexible porque el momento que atraviesa la tauromaquiaa es muy delicado y Sevilla es clave paraa su recuperación. Casi sin haber dormido, el empresario de la plaza de toros de la Maestranza, Ramón Valencia, recibe a ABC en su despacho.
—¿Puede resumir qué ha pasado y por r qué ha decidido suspender las corridas?
—Yo me siento defraudado porque cuando sale la ley que habla del metro y medio viene una coletilla final que dice que cuando no se pueda cumplir la distancia se tomarán otras medidas. Entiendo que eso es una puerta que abre el legislador para que nos podamos defender. Hay que legislar para que los espectáculos sean viables. Con unos empresarios serán rentables y con otros no, pero tienen que ser viables. En la plaza de toros de Sevilla, esa medida se traduce en un aforo que no llega a 1.400 personas y hace inviable dar toros. ¿Por qué hemos pedido el 50 por ciento de aforo? Porque aunque no es negocio, al menos es viable y permite mantener el compromiso con la afición.
—¿Con menos del 50 por ciento de aforo era imposible?
—Sí, y como no podíamos funcionar con el metro y medio, buscamos alternativas. ¿Qué es mejor, la distancia o que todo el mundo venga con un antígeno negativo y con una FPP2? Los profesionales nos han dicho que los antígenos son una solución mejor que el metro y medio. Contratamos a Megalab porque teníamos una confianza elevada en que con esas medidas podíamos seguir adelante. Hemos estado dialogando de forma fluida con la Junta de Andalucía desde hace mucho tiempo, lo tengo que decir, pero desgraciadamente ellos tenían una gran duda y la semana pasada hicieron una consulta al Gobierno para aclarar el tema. Parece ser que nadie dio una contestación firme y definitiva. Luego, en vez de tomar la decisión, la pasaron al consejo interterritorial de Salud, pero tampoco hubo contestación firme. Finalmente,te, me reuní el jueves con los responrespon sablessables de la Junta y me dijeron que había que cumplir el metro y medio. El BOE es para todo el mundo y otras comunidades han tomado otras medidas, algunas el 50, otras incluso el 75 por ciento... No lo entiendo.
—¿Cree que hay discriminación con los toros por parte de los políticos?
—Yo creo que la Junta apoya los toros, pero hay momentos en los que hay que tomar ciertas responsabilidades. Hay informes técnicos y difícilmente los políticos, si no vienen a favor, plasman la firma. Sí hay un agravio comparativo entre la tauromaquia y otros espectácculos de industrias culturales. El metro tr y medio no se cumple en ninguno. Se S nos debe dar el mismo trato que al resto. r
— A 72 horas de la corrida, los toreros aún a no sabían si tenían que hacer el paseíllo. p ¿Cómo se ha podido llegar a esta e situación?
— La Junta se ha escurrido y el Estado también. ta Pero el que tiene que torear ha h sufrido esa incertidumbre, es cierto que ahí no se ha tenido la sensibilidad d necesaria. Los aficionados han respetado muy bien los abonos y las entradas, para el domingo ya no quedaban localidades, pero esa incertidumbre se tenía que haber evitado. Los toreros se juegan la vida y no merecen esto.
—Incluso habían hecho un esfuerzo bajándose los honorarios, ¿no?
—A todos los niveles. Lo único que puedo hacer es agradecerles su colaboración a ellos y a la Maestranza. Así como otros años hemos podido tener alguna diferencia por honorarios, este año ese tema se resolvió en cinco minutos.
—¿La suspensión cuenta con el apoyo de los propietarios de la plaza, los maestrantes?
—Absolutamente, se llegó al consenso de que todos teníamos que colaborar y ellos han colaborado.
—Algún maestrante ha dicho públicamente que la empresa podría haber hecho un esfuerzo mayor.
—Yo estoy haciendo un esfuerzo porque voy a tener pérdidas importantes por este desengaño, pero apuesto sobre todo por la imagen de la plaza de toros de Sevilla. Dar un espectáculo de esa categoría con 1.300 personas no tiene sentido. Que Morante haya decidido matar Miura es un esfuerzo. Hacer eso ante 1.300 personas no se lo merece el toreo ni nadie. Un 50 por ciento de aforo da pérdidas, pero es un buen aspecto para una plaza como Sevilla.
—Sevilla es junto con Las Ventas la principal plaza, había muchas esperanzas puestas en que arrancara la temporada para que la Fiesta tomara de nuevo impulso.
—Si Sevilla se hubiese podido dar, salva la tauromaquia porque habría sido ejemplo para toda España. Yo me comprometí a intentar dar toros e hice el esfuerzo económico, pero la situación epidemiológica tampoco nos ha favorecido. Dije que iba a riesgo y ventura, que estaba dispuesto a sufrir las consecuencias, pero la situación no nos lo ha permitido.
—¿No era posible en las circunstancias actuales haber reajustado los carteles para bajar costes y poder abrir la plaza?
—Esto es Sevilla y el prestigio y la categoría que tiene es de hacer las ferias más rematadas de este país. Sevilla no se puede abrir para una novillada, esa es mi opinión. Eso se puede dar en un pueblo, pero Sevilla tiene que ser Sevilla y tiene que abrir con el cartel de un Domingo de Resurrección. Hay que respetar la plaza, yo la respeto de esa ma
«Si no se abre ninguna plaza habrá más presión social a los políticos que si las abrimos para mil personas porque así pueden decir que no han prohibido nada»
«Que Morante toree los Miura ante 1.300 personas no se lo merece el toreo ni nadie»
«Si se hubiesen podido dar los toros en Sevilla, se salva la tauromaquia este año»