Franquicias andaluzas retoman las aperturas tras el Covid
Marcas como Pomodoro y d-uñas impulsan sus redes en el mercado exterior
El número de marcas andaluzas de todos los sectores que se han enganchado al modelo de franquicia para ampliar el negocio apoyándose en la inversión de emprendedores y autónomos ha ido en aumento en los últimos años. Los datos más recientes de la Asociación Española de Franquiciadores (AEF) sitúan a Andalucía en la cuarta posición del ranking nacional, con un total de 161 cadenas, que facturan cerca de 1.224 millones de euros con una red de más de 6.000 locales y casi 17.000 trabajadores. Alrededor de una treintena de las enseñas de la región ya han salido al exterior.
La pandemia ha frenado los planes de crecimiento de las marcas españolas, que se han visto condicionadas por la práctica imposibilidad de implantarse en otros países debido a las restricciones de los movimientos internacionales. Se han producido cierres en el sector, pero también aperturas en territorio nacional y las franquicias empiezan a retomar su expansión en el exterior.
La AEF acaba de publicar el último informe sobre la franquicia española en el mundo, en el que se refleja que 32 marcas que tienen instalada su central en Andalucía han logrado exportar su modelo a otros mercados foráneos donde ya tienen franquiciados. Son tres menos de las que había antes de la pandemia, según esta misma fuente de información. La comunidad es la tercera del ranking autonómico con mayor presencia internacional, tras Cataluña y Madrid.
En plena pandemia, una de las marcas andaluzas de mayor crecimiento, la cadena de pizzerías Pomodoro, ha protagonizado una de las operaciones corporativas más destacadas del panorama franquiciador de la hostelería en España. El pasado enero, el fondo Ged Capital compró la sociedad dueña de las tabernas Lizarrán y Cantina Mariachi (Comess Group) y cerró después la adquisición de la mayoría accionarial de Pomodoro. Los hermanos José Carlos y Manuel José Vivas Tesón, que fundaron la enseña sevillana de comida italiana en el año 2011, continúan como socios del proyecto, el primero con labores de gestión desde la dirección de la cadena, que se mantiene en Sevilla. Ged Capital entró en Comess Group mediante una ampliación de capital, convirtiéndose en el accionista mayoritario del grupo junto a los socios actuales (Manuel Robledo, presidente y fundador de la empresa, y el fondo Oquendo).
Objetivo, Portugal
Pomodoro había iniciado su expansión internacional un año antes, en febrero de 2020, antes de la crisis sanitaria, con la apertura en Lisboa de su primer restaurante en el extranjero. Ya bajo la nueva propiedad, la cadena mantiene su plan de seguir creciendo en Portugal donde está buscando emplazamientos en centros comerciales para inaugurar más locales, señalan fuentes de la firma.
En el mercado español, Pomodoro ha seguido extendiendo su red durante la pandemia. La enseña hostelera cuenta ya con 118 establecimientos tras abrir siete en 2020 y tres más en lo que va de 2021. Las más recientes han sido en el centro comercial de El Corte Inglés en San Juan de Aznalfarache, en el centro comercial Olea de Huelva y en San Sebastián.
«Volvimos a reabrir los locales desde junio de 2020, tras el cierre de la hostelería decretado durante el confinamiento, aunque una parte de los establecimientos se habían mantenido con delivery », señalan las fuentes de Pomodoro. La comida a domicilio ha salvado a muchos hosteleros y también a franquiciados de la marca de comida italiana.
Corner de peluquería
D-uñas es otro de los operadores andaluces de franquicia más dinámicos. Esta enseña malagueña se ha convertido en una de las cadenas de belleza y estética más rutilantes de Sudamérica. Pertenece a la corporación D-beauty Group, fundada por Mery Oaknín Benzaquén y Sandra Benzaquén Barchilón en 2006, que explota otras marcas como d-pílate. Los centros de estética no se declararon actividades esenciales durante la pandemia y d-uñas también ha sufrido el impacto de la crisis como todo su sector, especialmente en México, su principal mercado exterior, uno de los países más castigados por el Covid. Dos cierres en España se han compensado con aperturas. Actualmente, tiene una red de 183 salones, 57 en España, de los cuales 11 están en Andalucía.
Su plan es remontar ya este año y volver a superar los 200 establecimientos. La último gran apuesta de d-uñas es un nuevo modelo de inversión para sus franquiciados, Beayty Complet, que suma a la belleza de manos, pies y cabina, un corner de peluquería. Este formato tiene ya su primer punto en Madrid. Con d-uñas ofrece cuatro modelos de franquicia con un capital de apertura que va desde los 19.000 euros hasta los 41.900.
Más de treinta cadenas que tienen su central en la comunidad autónoma han exportado sus redes