Hotel de la Gavidia: cinco plantas, 105 habitaciones y un restaurante
La vieja comisaría estará ‘envuelta’ en una cortina de vidrio y contará con un espacio de ‘coworking’ y un museo para la memoria histórica en los calabozos
El grupo que ha presentado la única oferta viable para reformar la vieja comisaría central de la Gavidia, en Sevilla, para convertirla en un hotel de cinco estrellas, Baraka Holding, ya tiene del todo perfilado su proyecto de reforma del edificio. Éste ya ha recibido el visto bueno de todos los estamentos técnicos tras ser trasladado tanto a la Gerencia de Urbanismo y Medio Ambiente del Ayuntamiento como al Colegio Oficial de Arquitectos de Sevilla. La próxima semana está previsto que la Gerencia adjudique ya definitivamente el proyecto, por el que la empresa pagará por la enajenación a las arcas municipales 8.750.000 euros más IVA. Además, esta compañía ha presentado un proyecto que supone una inversión sólo en la rehabilitación de 9,6 millones euros (más IVA). Por tanto, la operación se acercará a los 20 millones de euros sin incluir el mobiliario y los elementos propios para dotar de uso el contenido. Un verdadero hito tras casi diecinueve años de cierre de aquella jefatura policial.
El proyecto, al que ABC ha tenido acceso, recoge siguiendo lo previsto en los pliegos un uso mixto del edificio disponiendo de un total de 105 habitaciones hoteleras. El objetivo de la adjudicataria es poder tener más de un centenar de cuartos y lo ha cuadrado. Serán cinco las plantas dedicadas íntegramente al hospedaje. Las cubiertas se utilizarán como mirador y solarium. Las instalaciones del hotel se ubicarán en la planta semisótano. Otro dato destacado es que el establecimiento hotelero contará con una zona lúdica en la planta baja para uso y disfrute de los ciudadanos con un espacio libre y acceso independiente por la calle San Juan de Ávila donde se ubicará un restaurante.
Oficinas compartidas
Por otro lado, y como se exigía en el pliego, en la planta semisótano también funcionará un espacio de ‘coworking’, oficinas compartidas, con acceso directo también desde San Juan de Ávila y desarrollado en torno al patio de menores dimensiones, lo que permite iluminar y ventilar mejor la zona. Este uso tendrá un funciona
Se mantendrá toda la estructura del edificio y el hotel se va a articular en torno a los dos patios de la vieja jefatura
Un largo proceso burocrático El edificio lleva casi diecinueve años cerrado y hubo que recalificar la finca para eliminar su «uso comercial»
miento del todo independiente al hotel. «Se propone un cierre mediante una barandilla que, por un lado, permite concebir un único espacio global y, por otro, el uso independiente y el hotel en función de los horarios de funcionamiento y de los intereses de ambos», refleja el proyecto constructivo. Será ese, por tanto, un espacio de unos 500 metros cuadrados versátil y flexible, de alguna manera, para adaptarse a la demanda de cada momento.
Además, el plan incluye —también por exigencia del pliego municipal que se sacó a concurso— un espacio museístico de memoria histórica con un proyecto de musealización y con acceso libre desde la calle en los calabozos de la antigua comisaría. En este punto, los visitantes podrán tener «nuevas experiencias interactivas, sumergirse en el arte digital», con una exposición en 360 grados que «da la posibilidad al usuario de revivir momentos clave» de la época de la dictadura franquista y de la transición en Sevilla.
Todo se articula alrededor de los dos patios del viejo edificio, al igual que lo hizo en su origen. Todas las plantas del hotel se articulan con esos dos ejes de los patios. «Con la actuación se pretende que el edifico mantenga la configuración que le dio valor en su día, así como cumplir con la normativa de protección que debe conservar el edificio íntegro en todos sus aspectos arquitectónicos originales. Se mantienen los distintos cuerpos en sus diferentes alturas e, igualmente, los núcleos de comunicación vertical existentes, por lo que la configuración del edificio no se modifica sustancialmente». Otro elemento característico que tendrá el hotel será una fachada de vidrio superpuesta a la original, independiente de la estructura del edificio en sí, «a modo de cortina», una especie de «velo» que «dará al edificio una estéticaética moder-moder nista». La cortina de vidrioio ofrecerá al hotel «una mejora muy importantemportante tan-tanto en el confort acústico comocomo tér-térmico y un aumento de la eficien-eficiencia energética, obteniendodo un edificio eficiente y respetuo-tuoso con la naturaleza».
La apertura del último so-sobre del concurso este pasa-ado mes de marzo, en el quee sólo quedó Baraka Hol-ldings, deparó un leve in-ncremento de la oferta conn respecto al precio que esta-aba marcado de salida poror parte de la Gerencia de Urba-rbanismo. La oferta económicaca ha sido finalmente de 8.750.00050.000 (más IVA), con lo que superóeró el pre-precio de licitación, que estababa fijado en 8.565.277 euros (más IVA).. La propues-propuesta financiera también mejoróejoró la base que había señalado el gobiernoobierno local del socialista Juan Espadas. El proyecto, además, cuenta ya con los informes favorables del servicio técnico de la Gerencia y también de la Comisión Local de Patrimonio. Todo se ajusta a la normativa y a los requisitos de impacto que demanda esta zona.
Reurbanización del entorno
Esta empresa, que no forma parte de ninguna gran cadena hotelera, también se va a hacer cargo de la reurbanización de la plaza de la Concordia, la que conecta este viejo edificio policial propiedad del Ayuntamiento con la antigua iglesia de San Hermenegildodo, también municipalmunicipal. Esta mejora incluida en la oferta que la compañía presentó al concurso se conoció ayer, cuando se abrió el último sobre en el proceso administrativo que lleva a cabo la Gerencia de Urbanismo. En él, según ha podido saber ABC, la promotora incluyó no sólo la mejora del entorno de la antigua jefatura (la llamada zona 1 en el pliego), que incluye la reurbanización de las calles San Juan de Ávila y el pequeño tramo de Virgen de los Buenos Libros, sino también la denominada zona 2, esto es, la plaza de la Concordia en sí, en la que se creará una espacio más peatonal entre el propio hotel y la plazoleta, tanto en la zona más cercana a la propia plaza de la Gavidia como en la embocadura del aparcamiento subterráneo de El Corte Inglés.
En septiembre de 2019, el Ayuntamiento terminó con años de tramitaciones, idas y venidas y disputas políticas entre administraciones desbloqueando el futuro del edificio mediante el final de su proceso de recalificación,