Las cosas que importan: educación y salud
Esta doctora en Derecho Constitucional, profesora titular en la Universidad de Sevilla, ha sido parlamentaria por Podemos, formación que abandonó desencantada por su deriva. Ahora es la coordinadora general de Más País Andalucía, el partido de Errejón en la comunidad autónoma y por el que concurrirá a las elecciones cuando se convoquen.
—Estará muy contenta con el resultado de su partido en Madrid
— Estoy satisfecha con el resultado de Más Madrid, sí. Porque es el producto fruto de un una magnífica campaña electoral en la que hemos sabido hablar de las cosas que le importan a la gente.
—¿Les marca el camino a seguir?
— En Andalucía estamos armando el proyecto porque queremos presentarnos primero al Parlamento andaluz y luego a los ayuntamientos. Pero somos un partido autónomo, Más País Andalucía, que estamos inscritos con CIF propio y censo propio. Queríamos llamarnos Más Andalucía pero la marca ya estaba registrada y no ha sido posible usarla. Tenemos implantación en toda Andalucía aunque la estructura está más desarrollada en Sevilla, Málaga, Granada, Cádiz y Córdoba. —¿Son entonces independientes de Errejón? Lo digo por lo que dijo respecto a la integración de Teresa Rodríguez y Kichi en sus siglas.
— Somos un partido federal que crece desde los territorios. Por eso en cada sitio nos llamamos de una manera y hay una identidad diferente e incluso una organización distinta. Errejón dijo varias veces que serían los compañeros de Andalucía los que decidirían. Y así será.
—¿Y cuál es su opinión? ¿Le parece bien que se integren los Anticapitalistas?
— Estamos conformando proyectos distintos Teresa Rodríguez y nosotros. Ya tenemos un protocolo de colaboración con Iniciativa del Pueblo Andaluz, un acuerdo firmado con Vamos Granada, con algunos concejales de Actúa y también representantes de agrupaciones electorales. Vamos a seguir explorando esa línea.
—¿Tampoco con Adelante Andalucía?
— No hay ningún tipo de relación abierta ni vía de diálogo. Es muy evidente también en este caso que tenemos proyectos distintos a Podemos y eso es lo que motiva que ahora estemos aquí.
—¿Y hay espacio electoral a la izquierda del PSOE para tanto partido?
— A mí es que no me gusta definirme como un partido de izquierdas. Somos un partido progresista, verde, que busca la radicalidad democrática y la justicia social. Nosotros aspiramos a abrir un espacio más amplio, más transversal.
—Con esos mimbres, ¿cree que podrían lograr un al PSOE como en la Asamblea de Madrid?
— En Madrid partían de veinte escaños y nosotros todavía no tenemos representación en el Parlamento. Estamos en el camino. Nuestra meta es entrar en el Parlamento andaluz en la siguiente legislatura, un objetivo que es factible y luego hablaremos.
—El PSOE andaluz no pasa ahora por su mejor momento.
— El problema que tenemos es que nadie está ofreciendo una alternativa distinta a los andaluces porque no hay oposición parlamentaria. El PSOE tiene una actividad militante destinada
Defiende que su partido está pegado a la realidad y huye del ruido político. Considera como un asunto prioritario la reforma de la educación pública. «Es terrible lo que está pasando. Estamos viendo cómo se cierran líneas y los niños y niñas con necesidades educativas especiales no están atendidos en sus coles porque no hay profesionales de apoyo suficientes». A su juicio, la educación es la clave para lograr una sociedad más igualitaria y se debe invertir más dinero, empezando por bajar la ratio de las aulas. «En sanidad hay una preocupación tremenda por la Atención Primaria porque la han desmantelado. El Sindicato Médico ha denunciado que la atención telefónica media por paciente en Andalucía es de dos minutos y medio. Hay un gusto de este Gobierno por una privatización de los servicios públicos que se está haciendo de manera callada pero con una hoja de ruta». a las primarias, no hacen oposición. Y en Unidas Podemos también están en esas. Y tengo la sensación de que la primera vez que llega un Gobierno de derechas a la Junta se le ha dejado todo el campo libre; nadie le dice a los andaluces lo que están haciendo.
—Dicen que son un partido verde. Eso mismo defiende el presidente andaluz de su Gobierno.
— Lo dice como podría decir que es comunista pero no es cierto. No es un Gobierno verde para nada y lo está demostrando eliminando controles administrativos que en realidad son para la protección del Medio Ambiente. Vamos a poner ladrillos hasta en el último rincón de las playas y luego cuando terminemos de trabajar, ponemos copas a los turistas. Y si nuestros hijos quieren trabajar en otra cosa se van a tener que ir a Madrid o al extranjero. Es una cuestión de decisión política.
—¿No cree entonces que los fondos europeos se destinen a esas políticas?
— El cambio pasa por las energías renovables, economía circular, jornada de 32 horas y revolución digital. Eso necesita una administración emprendedora; debería ser el momento para que la iniciativa privada y el poder público piensen qué modelo queremos.
Juanma Moreno dice que es verde lo mismo que podía decir que es comunista