Espadas se lanza a la campaña para unir a un PSOE dividido
Se presenta en Granada como candidato en las primarias e identifica a Susana Díaz con la confrontación
No por esperado ha sido menos simbólico. Juan Espadas, alcalde de Sevilla, presentó ayer en Granada su candidatura a las primarias del PSOE andaluz. El lugar escogido, en la Andalucía oriental, precisamente en la tierra de la Alhambra, una plaza mayor del socialismo en la comunidad, está cargado de connotaciones. Era un baluarte del susanismo hasta hace poco. No en vano, la secretaria general de los socialistas andaluces, Susana Díaz, superó en esta provincia en votos al actual presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, en las primarias de 2017, cuando éste terminó arrollándola. Eso fue hace ahora cuatro años y mucho ha cambiado en Granada desde entonces. Espadas lo sabe.
El acto en la capital nazarí ha sido para él una oportunidad de mostrar músculo de cara a las primarias. Hasta 300 personas se congregaron en la zona del Paseo del Salón. Aplausos, vítores y amplia representación institucional de todos los territorios de Andalucía. Los más significativos, tres secretarios provinciales. De Jaén, Granada y Cádiz. En todos estos territorios se pidieron primarias anticipadas antes de la decisión de convocarlas por Susana Díaz. Huelva estaba representada por la presidenta de la Diputación, María Eugenia Limón.
Espadas no escatimó a la hora de mandar varios mensajes a su adversaria. «Esta es la candidatura que hace autocrítica» del 1 de octubre de 2016 y del 2 de diciembre de 2018. En la primera fecha, Pedro Sánchez dimitió como líder del PSOE tras un Comité Federal que aún escuece en la militancia. En la segunda, el partido perdió la Junta de Andalucía tras más de 36 años en el poder, pese a haber ganado los comicios. En ambas, Díaz fue la gran protagonista y la gran perdedora.
Agravios provinciales
Espadas no sólo quería estrechar lazos entre la Andalucía oriental y occidental. «Conozco los agravios comparativos. Conmigo podéis desterrar completamente esto», señalaba. La principal unidad de la que habló es precisamente la de su propio partido. A pesar de estos ‘dardos’, el sevillano presentó a la suya como «la candidatura de la unidad» y tendió la mano a Susana Díaz para una lista «conjunta». «Somos socialistas. Ni de Pepe, ni de Juan, ni de Pepita ni de Mariquita. Socialistas», remarcaba.
La oferta de Espadas alude a las posibles heridas que estos comicios pueden abrir en el seno de los socialistas andaluces. Es su «misión» evitarlo, decía el sevillano, para después aclarar que el término se le había ocurrido escuchando de camino al acto la banda sonora de la película ‘La misión’, de Ennio Morricone. «A mí me gustan esas cosas, qué se le va a hacer», señalaba arrancando las risas del público.
En el acto recibía nuevos espaldarazos para su ‘misión’. Todo un peso pesado como Miguel Ángel Heredia, senador, exsecretario general del PSOE de Málaga y hasta hace poco muy próximo a Díaz, acompañaba a la expedición malagueña. Él, al igual que otros como el portavoz del grupo socialista en Málaga, Daniel Pérez, escenificaban su abandono a la actual líder del PSOE andaluz en favor de Espadas.
Algunos apoyos, eso sí, se dejaron ver más que otros. A José Entrena, el secretario provincial anfitrión y presidente de la Diputación de Granada, incluso le tuvo que gritar el candidato desde el escenario para encontrarlo. «Pepe, que no te veo», decía. Entre
Mano tendida a su adversaria EL alcalde de Sevilla tendió la mano a Susana Díaz, a la que ofreció «una candidatura conjunta»
Revisión del pasado inmediato Pidió hacer «autocrítica» del comité federal en el que dimitió Sánchez y de la pérdida de la Junta tras 37 años
na, que siempre había demostrado lealtad a Susana Díaz, ha acabado levantado y aplaudido por Espadas por su «compromiso» con la unidad, «aunque haya ideas contrarias».
Portavoces municipales, concejales, y militantes de todos los puntos de Andalucía asistían al evento con el viento dando guerra. Espadas cogía el guante y hablaba de un viento «de cambio» que contará con la fuerza de los más de 458 alcaldes y 4.200 concejales que su candidatura ha recabado. Todo con el apoyo implícito de Ferraz. Aunque menos conocidos, miembros del Gobierno en Madrid daban ánimos al candidato.
Críticas a Moreno
Armó un discurso presidencialista y con críticas a la actual gestión de la Junta, confrontando directamente con el presidente andaluz, Juanma Moreno (PP). Defendió su gestión en el consistorio sevillano y la herencia socialista andaluza e hizo constantes guiños a la política municipal: «Menos hablar de municipalismo y más hablar con municipalistas», remarcaba.
Pero los comicios son internos. 45.000 militantes decidirán el 13 de junio la suerte del partido en Andalucía. Es el primer día y Espadas empezaba en Granada. «Díaz tardó hasta un año en venir tras recuperar la Alcaldía de la ciudad», comentaron algunos socialistas en el acto. A pocos dejó sin saludar el candidato. Fue el último en irse del acto, cuando ya las sillas se plegaban.
Pese a las llamadas al juego limpio por parte de ambos candidatos, ya han surgido voces que lo ponen en cuestión. El PSOE de Peñarroya, en Córdoba, denunció una alteración del censo para «que gane la candidatura del aparato federal». Con seguridad, habrá más reproches de este tipo a medida que se acerque la fecha de las urnas.