LA PANDEMIA VUELVE A EMPANTANAR LA COGOBERNANZA

La gestión autonómica de la pandemia, lo que Pedro Sánchez denominó cogobernanza, ha vuelto a convertirse en un inmenso caos de medidas improvisadas y generadoras de agravios entre los ciudadanos de unas comunidades y otras. Para colmo, también hay criterios judiciales diferentes, según dictamine el Tribunal Superior de Justicia de una autonomía o de otra, lo que terminará abocando al Supremo a dictar criterios homogéneos sobre confinamientos perimetrales o toques de queda. Además, el aumento de contagios y los excesos de nuestro ocio, junto a tanta confusión jurídica, han movido a los países más relevantes de nuestro entorno a aconsejar a sus ciudadanos que no viajen a España. Pero sigue sin haber una ley de pandemia, no hay criterios únicos de actuación, Sanidad no ofrece soluciones –solo soberbia–, y ninguna comunidad sabe a qué atenerse con sus centros de salud de nuevo repletos. Casi año y medio después, España se bloquea sola.