Los precios de energía y alimentos amargan el verano a los españoles
∑Nuevo récord histórico del precio de la luz cuando se dispara la demanda por la utilización del aire acondicionado ∑Llenar el depósito de un vehículo es ahora unos 11 euros más caro que a comienzos de año
ste verano está siendo muy complicado para los ciudadanos por el rápido rebrote de variantes del Covid extendiéndose por todo el país. Al mismo tiempo, los maltrechos consumidores que aún no se han recuperado de la crisis ocasionada por la pandemia están sufriendo un encarecimiento de la energía y de los alimentos que no se recuerda desde hace décadas. Precisamente, la electricidad y los alimentos protagonizan la subida de la inflación hasta ahora, que en junio se situó en el 2,7%, la más elevada desde febrero de 2017, según el Instituto Nacional de Estadística (INE).
Cabe recordar que el incremento del IPC disminuye el poder adquisitivo de los consumidores e impacta directamente en las revisiones salariales, en los convenios y en la actualización de las pensiones.
En este segundo trimestre del año, la palma se la lleva la electricidad, que hoy marcará un récord histórico en el mercado mayorista: 106,57 euros el megavatio hora (MWh) como precio medio, con un máximo de 110,64 euros y un mínimo de 100,83 euros. Ayer ya había alcanzado su récord anual y el segundo más caro de la historia, superando la cota de los 101 euros el MWh.
La media de julio hasta hoy es de 92 euros, lo que supone un incremento del 166% respecto al mismo mes del año pasado (34,63 euros). Si tomamos como referencia solo 2021, la subida es del 119%.
EEl kWh, a casi 27 céntimos
De estos precios sale la tarifa regulada de la luz que tienen unos 11 millones de consumidores, el 40% del total. Hoy volverá a alcanzar otro máximo: 0,2679 euros el kilovatio hora (kWh) entre las 20 y 21 horas. Esta tarifa es un 116% más cara que la que había al cierre de 2020.
La subida de la electricidad se debe al fuerte incremento de la cotización internacional del gas natural y del mercado de CO2, que han duplicado sus precios en el último año.
Su repercusión es directa, tanto en el mercado mayorista español como en el de la mayoría de países europeos, ya que las centrales que generan electricidad con gas son las más caras, entran en el sistema cuando aumenta la demanda y además, fijan el precio del día al resto de las tecnologías que son mucho más baratas, como las renovables y las nucleares. Además, en estos meses de calor es normalmente cuando menos funcionan los parques eólicos, los cuales, hacen bajar los precios de la electricidad.
«Estamos preocupados por el alza del precio de la energía», afirmó ayer el ministro de Consumo, Alberto Garzón, tras el Consejo de Ministros.
Explicó que esas subidas responden a «razones de carácter internacional que afectan al precio de la energía y desgraciadamente apunta a que ese mercado internacional va a seguir tensionado los próximos meses».
Añadió que «eso es lo que ya motivó que tomáramos medidas extraordinarias de cara a atajar esos precios» cuando se traducen en un incremento de la factura de la luz, y recordó medidas como la bajada del IVA de la luz del 21 al 10%, así como «la expansión del bono social, el anteproyecto de ley de ‘beneficios caídos del cielo’, que detrae 1.000 millones de euros del sector energético para sufragar los gastos de la factura de la luz y proteger a las familias más vulnerables, y medidas estructurales como el incremento de la inversión en las energías renovables».
A este respecto, el titular de Consumo explicó que «las renovables son las más baratas y las que se introducen en el ‘pool’ en primer lugar, lo que sucede es que cuando, por ejemplo, el precio del gas natural a nivel internacional se dispara, ese precio termina determinando el precio de la factura».
«Soberanía energética»
Por todo ello, Garzón resaltó que la intención del Gobierno es «apostar por una energía más barata e incrementar la soberanía energética de nuestro país», resaltando que el Ejecutivo hace «las cosas en el sentido correcto» al apostar por estas líneas, «frente a otros gobiernos que subieron el IVA o llegaron a poner un ‘impuesto al sol’».
Sin embargo, hay que destacar que el hecho de que los precios de la electricidad se hayan disparado en los últimos meses deja sin efecto en la práctica las medidas aprobadas hace casi un mes por el Gobierno, como la mencionada rebaja temporal del IVA en la factura de la luz del 21 al 10% y la suspensión entre julio y septiembre del impuesto del 7% a la generación que deben de abonar las eléctricas.
«Mirar atrás»
La portavoz del grupo popular en el Congreso, Cuca Gamarra, criticó ayer que el Gobierno liderado por Pedro Sánchez esté centrado en «mirar atrás» con la ley de Memoria Democrática que ha aprobado el Consejo de Ministros y no se ocupe de los «muchos problemas» que tienen en el momento presente los españoles, como el hecho de que el precio de la luz esté en máximos históricos. A su entender, «mirar hacia atrás» no va a dar «ni futuro ni esperanza».
Por su parte, la tarifa del gas natural también es más cara desde el pasado día 1 de este mes: un 3,68% de media respecto a la que estaba vigente