Matonismo rentable
Una pistola nazi con los nombres del PP, Vox y la prensa grabados. Así se ha presentado como columnista en una revista de izquierdas tras su prejubilación como político, que Iglesias entretiene con tertulias en emisoras de tanto progreso como el de su cuenta corriente, pues hasta febrero los españoles le pagan ya 5.300 euros al mes por no hacer nada. Esa evocación del matonismo es lo único mollar de un artículo que no se aparta mucho de aquella tabarra vicepresidencial, tan irrelevante y plomiza (por seguir con lo de las balas) como la de un vendedor de crecepelo del Far West.