Adiós Tokio, hola París
Se cerraron ayer los Juegos Paralímpicos de Tokio, que han concluido con un total de 36 medallas (nueve de oro, quince de plata y doce de bronce) en siete deportes: atletismo, ciclismo, judo, natación, tenis de mesa, triatlón y tiro. Sin llegar a la presea, los deportistas españoles se han hecho con 131 diplomas paralímpicos, lo que significa que España ha estado presente en 167 de las finales disputadas. El balance de la cita japonesa mejora en cinco medallas las conseguidas en la última cita, Río de Janeiro, lo que indica la progresión de la selección paralímpica, teniendo en cuenta la dificultad añadida para la preparación que ha supuesto la pandemia. Con medalla o sin ella, consiguiendo o no el diploma olímpico, hablamos de deportistas excepcionales, campeones de la vida que sin arredrarse por su situación dan un conmovedor ejemplo de superación que ennoblece su condición humana. Ya tienen las ganas dispuestas para continuar su gesta en París, dentro de tres veranos. Son un ejemplo para toda la sociedad. Y esa es su principal medalla.