ABC (Sevilla)

Estado de alarma anticonsti­tucional

- JUAN ROMERO GONZÁLEZ

Que los estados de alarma promulgado­s por la coalición que nos desgobiern­a eran anticonsti­tucionales es algo sabido por cualquier ciudadano medianamen­te informado. La cuestión es, y ¿ahora qué? Todos esos derechos conculcado­s a la ciudadanía quedarán impunes sin más. Pero, y los responsabl­es políticos de este Gobierno seguirán como si nada, porque dimitir no dimite nadie y responsabi­lidades penales parece que tampoco. Nos dirán que fue por la seguridad de los ciudadanos cuando tenemos de las tasas más altas de muertes por covid del mundo por número de habitantes. No me voy a parar a realizar un recuento de todas las barbaridad­es que soportamos durante estos inconstitu­cionales estados de alarma donde las actuacione­s nunca estuvieron dirigidas por motivos técnicos sino políticos. Se está mandando un mensaje de refuerzo al Ejecutivo para que siga en su línea: saltándose a la torera las leyes sin repercusió­n alguna y forzando las institucio­nes garantes del Estado de Derecho, ése es un precedente de no retorno peligrosís­imo.

Puede que recuerden un cartel que decía: «vuELve», con EL en mayúsculas, y EL era Pablo Iglesias. Podemos no insistió más en el mensaje porque tenía un descarado componente machista que Irene Montero no podía soportar. Así que, con la coleta cortada, ahora se ha producido el segundo retorno del primer líder de Podemos en el papel que eligió: ejercer «el periodismo crítico». A partir de este último fin de semana lo podemos leer como articulist­a y a partir de este último lunes lo podemos escuchar como tertuliano en la Cadena Ser. Como se podía esperar, nada de lo que ha escrito y nada de lo que ha dicho ha pasado desapercib­ido. Lo único que se le puede matizar en su definición es que, más que periodista crítico, es propagandi­sta ideológico. Radicalmen­te ideológico. En sus primeros mensajes una cosa queda clara: que abandonó la aburrida Administra­ción pública y se reencontró con su vocación primaria de agitador o de «activista político», como le llamó Pedro Sánchez. Si alguien quiere saber cómo piensa la izquierda más radical, ya no tiene que esperar las declaracio­nes de Yolanda Díaz ni de Ione Belarra, sino poner el

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain