Ensaladas para recuperar la línea tras el verano
Nos detenemos en diez recetas verdes y deliciosas que se pueden saborear en bares y restaurantes sevillanos
Las ensaladas son el ejemplo más fiel de que comer en la calle no tiene por qué suponer una ingesta superior de calorías de la que se hace en casa. Algunas son típicas y conocidas y no por ello menos sabrosas. Otras son originales y divertidas, porque a estas alturas ya sabemos que comer ensalada puede llegar a ser una experiencia de lo más completa.
En ConTenedor (San Luis, 50) hacen una de papaya macerada en cítricos y se acompaña de lenteja caviar, huevas de tobiko y un punto picante, una mezcla inesperada que sorprende por los matices de los productos y del aliño, que la hacen refrescante y exótica.
Mango con Sal (Barcelona, 5) es pequeño espacio junto a Plaza Nueva es el paraíso para los amantes de lo verde. Las hay de varios tipos pero nos quedamos con la De Grecia a Milán, una amalgama de productos saludables entre los que se encuentran hojas mezclum, tomate, pepino y aceitunas negras cubierto con un aderezo griego y coronado con mozarella y mango...
Después de seducirnos con su ensalada del país de la sonrisa, La Cochera del Abuelo (Álvaro de Bazán, 2) arranca la nueva temporada con esta ensalada de cogollos asados con balsámico que acompaña de tomatitos sin piel, encurtidos, rabanitos y vinagreta de tomate. Es una mezcla de sabores muy sugerente que sorprende también por ser una elaboración templada y ofrece una versión inesperada de una hoja como el cogollo. También templada es la ensalada que nos seduce en la carta de La Quinta (Pl. Padre Jerónimo de Córdoba, 11). Lleva tiempo en carta y es una de las opciones más demandadas por aquéllos que buscan algo ligero. Es una ensalada de calabacines a la brasa con burrata y pesto rojo que refleja el gusto del chef Gonzalo Villalba por la parrilla para sacar todo el sabor a las verduras y hortalizas.
En Depikofino (Eduardo Dato, 29) elaboran una ensalada que combina a la perfección ingredientes saludables y sabrosos como el queso de cabra caramelizado y los frutos secos. Está aderezada con jalea de cebolla y canela, lo que da un sabor nuevo y diferente a estos ingredientes y culmina con una vinagreta de arándanos que aporta el matiz dulce y contrasta con la canela y la cebolla.
Siempre delicioso y un imprescindible de las ensaladas es el tomate y en Sal Gorda (Alcaicería de la Loza, 23) lo presentan en forma de tartar de tomate rosa. Lleva alga wakame, tomate seco, alcaparras y una vinagreta de goma sésamo, una receta ligera pero cargada de matices.
El canónigo es una de las hojas más aclamadas en las ensaladas de bares y restaurantes. En este caso, el chef Diego Caminos lo acompaña en La Brunilda (Galera, 5) con queso de cabra y confitura de tomate, además de yuca. El aliño es una vinagreta de aceite de oliva, vinagre balsámico, mostaza y miel.
La de salmón de El Pasaje (Pasaje de Vila 8-10) sirven la típica ensalada que se puede tomar como plato único y reúne todos los nutrientes que el cuerpo necesita para no desfallecer a las pocas horas. Salmón marinado y manzana acompañan a unas hojas de lechuga y tomates cherry que se aliñan con una vinagreta de frutos secos.
En Estraperlo (Santa Rosa, 4) apuestan por los productos cercanos, naturales y ecológicos todo sabe a lo que tiene que saber. Magníficos tomates coronados por una burrata que se riega con un aliño de pesto. Su tomate con burrata es uno de los entrantes más aclamados. Eso sí, dada la consistencia y jugosidad de la burrata se recomienda compartir el plato para que resulte realmente ligero. En Ignacio Vidal (Progreso, 27) apuestan por una ensalada de burrata con rúcula servida sobre un tartar de tomate y servida junto a pasas, nueces y un aliño balsámico.
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