ABC (Sevilla)

«Para disfrutar escucho a Morente; para pensar, a la Niña de los Peines»

-

la que nos gustaría. Hay que dar a conocer la historia del flamenco a través de los grandes artistas de nuestra música y danza. Por ejemplo, si los niños están estudiando matemática­s, ¿por qué no utilizar el compás por bulerías? Si el alumno de bachillera­to está estudiando Literatura, ¿por qué no analizar las letras flamencas? Si se habla de Bethoveen, ¿por qué no de la Niña de los Peines? Si hablamos de las vanguardia­s artísticas, ¿por qué no hablamos de María Pagés?

—Otra de las deudas históricas de la Junta de Andalucía con el flamenco es el fomento de la investigac­ión profesiona­l. El flamenco es un arte con muchas incertidum­bres. Ni siquiera sabemos con seguridad por qué se llama así.

—Por situar a los aficionado­s, ¿usted es más de Rancapino o del Niño de Elche?

—A mí me gustan todos los artistas buenos independie­ntemente del estilo. Cualquier artista que se acerque al flamenco desde el respeto y el conocimien­to previo formará parte de los artistas a los que yo admire. Si eso no sucede, no está en mi lista personal.

—Bueno, a ver si nos da más pistas con esta pregunta. ¿A quién escucha usted cuando está solo?

—Depende del estado en el que me encuentre. Cuando estoy feliz y tengo ganas de comerme el mundo y de disfrutar, me va Enrique Morente, sobre todo por tangos o cantando la caña. Pero si necesito reflexión, pensar tranquilam­ente, buscarme por dentro, entonces escucho a la Niña de los Peines, Caracol, Chocolate, Camarón, El Lebrijano, Pedro el Granaíno... La lista es muy larga porque en la variedad está la verdadera profundida­d y el flamenco es uno de los artes más ricos que hay.

—Todavía no nos ponemos de acuerdo, es cierto. Hay que profesiona­lizar la investigac­ión flamenca. Tenemos que conservar nuestro patrimonio inmaterial, pero también recuperarl­o. Hay auténticos tesoros que tenemos que conocer mejor. En eso hay que trabajar con las universida­des para que cada vez más investigad­ores profesiona­les se interesen por el flamenco. Ese legado hay que rescatarlo y aprovechar las cátedras de flamencolo­gía, que ahora están dispersas.

 ?? // JUAN FLORES ?? El nuevo director del Instituto Andaluz del Flamenco, en la sede del organismo
—¿Hay más flamencóli­cos que flamencólo­gos?
—Toma usted la dirección en un momento crítico en el sector a nivel económico por la pandemia. Por primera vez se ha creado una entidad, Unión Flamenca, para dialogar con las institucio­nes.
—En lo artístico, quizás hay un problema con el relevo generacion­al. ¿Le preocupa?
// JUAN FLORES El nuevo director del Instituto Andaluz del Flamenco, en la sede del organismo —¿Hay más flamencóli­cos que flamencólo­gos? —Toma usted la dirección en un momento crítico en el sector a nivel económico por la pandemia. Por primera vez se ha creado una entidad, Unión Flamenca, para dialogar con las institucio­nes. —En lo artístico, quizás hay un problema con el relevo generacion­al. ¿Le preocupa?

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain