Armas de guerra y disfraces policiales: los métodos de una organización para robar droga
MÁLAGA
Eran expertos en robos de droga a otros traficantes. Una banda de diez personas, de las que seis han sido enviadas prisión por la autoridad judicial. Usaban armas de guerra, se hacía pasar por policías y vivían con fuertes medidas de seguridad. El capo iba siempre armado y usaba documentación falsa. La Guardia Civil y la Policía Nacional en una operación conjunta en la Costa del Sol. Se ha desarticulado una organización criminal dedicada a efectuar ‘vuelcos’, que en argot policial es como se llama a los robos violentos de droga a otros narcotraficantes.
Según las autoridades, los integrantes de la red eran «muy violentos». En los asaltos usaban armas de guerra y simulaban ser agentes de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad con señales y disfraces que les daban una apariencia policial. Nueve de los detenidos han sido en las localidades de Estepona y Marbella. Otro en el municipio gaditano de Ubrique.
Durante la investigación se practicaron registros en dos viviendas utilizadas como ‘guarderías’ o almacén de la droga en Estepona, así como en un inmueble de Mijas donde el líder de la trama había fijado su residencia temporalmente. Durante la operación se intervino, entre otros efectos, 70 kilogramos de hachís, cinco vehículos, entre los que había dos que costaban como robados, matrículas sustraídas, un subfusil de guerra, varias pistolas, abundante munición, documentos de identidad falsos.
Los ‘vuelcos’
En estos lugares había una nutrida serie de objetos que los investigadores creen que eran usados para consumar los ‘vuelcos’, como son uniformes, placas emblemas, balizas o dispositivos lanza-destellos para señalizar. La operación ‘Sirena21’ se inició a partir de unas informaciones que apuntaban como un entramado criminal, asentado mayoritariamente en la costa occidental de la provincia de Málaga y ramificaciones en Cádiz, perpetraba ‘vuelcos’ a otros narcotraficantes por los medios descritos. La investigación comenzó en junio de 2021 y se llevó de manera conjunta desde los inicios, por parte de la Guardia Civil y de la Policía Nacional, al confluir las investigaciones de agentes de ambos cuerpos sobre una misma red criminal. El líder de la organización es definido por los agentes como «una persona peligrosa y muy escurridiza».