El FMI vaticina que la recesión atrapará a media Europa en 2023
▶ Espera «un año más difícil» que 2022 por la ralentización simultánea de la UE, EE.UU. y China
«Para la mayor parte de la economía mundial este será un año difícil, más difícil que el año que dejamos atrás». La directora gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI), Kristalina Georgieva, ha querido dejar claro desde el primer instante que lo que le espera a la economía mundial en 2023 son básicamente curvas y que las autoridades deberán estar preparadas para actuar en este escenario.
El diagnóstico de los analistas del FMI apunta a que una tercera parte de las economías del planeta entrarán en recesión en algún momento de este año y que la situación será aún más sombría en la Unión Europea, donde se espera que la recesión atenace a la mitad de sus economías, las principales afectadas por el foco de inestabilidad que supone la persistencia del conflicto armado en Ucrania que ya va para un año.
El pesimismo del Fondo tiene una explicación. Según la economista búlgara que dirige el Fondo desde octubre de 2019, tras desbancar entre otras en la carrera por alcanzar el cargo a la actual vicepresidenta primera del Gobierno de España, Nadia Calviño, la razón hay que buscarla en que las tres grandes economías del mundo, Estados Unidos, la Unión Europea y China, «se están desacelerando simultáneamente, según explicó ayer en una entrevista recogida por Ep.
En opinión de Georgieva, Estados Unidos acredita una economía más resistente y puede esquivar la recesión, mientras que «la mitad de la Unión Europea estará en recesión el próximo año» y China se va a desacelerar aún más.
El pronóstico del Fondo Monetario Internacional excluye al menos de momento a España de ese grupo de economías a las que les aguarda la recesión económica en 2023. Pese a que hubo un momento allá por los meses de octubre y noviembre en que los indicadores económicos sugerían que España podría atravesar una recesión técnica entre el último trimestre de 2022 y el primero de 2023, la evolución más reciente de la economía apunta al estancamiento como el escenario más probable.
Efectos colaterales
El INE reveló hace apenas unos días que la economía se estancó en el tercer trimestre del año tras registrar una variación del 0,1% y los modelos de los analistas auguran que este se prolongará al menos hasta la próxima primavera, lo que supondrá encadenar tres trimestres de estancamiento económico. Un diagnóstico que, no obstante, es sensiblemente mejor que el que se anuncia para otras grandes economías del euro como Alemania o Italia para las que se espera una recesión persistente en 2023.
La directora gerente del FMI lanzó a pesar de todo un aviso a navegantes y advirtió de que aunque haya países que evitarán la contracción esta «se sentirá como una recesión para cientos de millones de personas» por los posibles efectos colaterales que pueda tener el enfriamiento de los principales motores económicos mundiales. El FMI anticipa una desaceleración de la economía que hará que el crecimiento mundial se frene al menos al 2,7% el próximo año, cuando en 2021 fue del 6% y el año pasado del 3,2%. Para España ha previsto un crecimiento del 1,2% en 2023, por debajo del 2,1% del Gobierno.