Expertos cuestionan la viabilidad del futuro hidroducto H2Med
▶ Apuestan porque la producción de hidrógeno esté próxima a los puntos de la demanda
El futuro hidroducto H2Med que conectará Barcelona con Marsella a partir de, como mínimo, al año 2030 ha sido presentado a la convocatoria para Proyectos de Interés Común (PCI, por sus siglas en inglés) para recibir financiación europea, ya que su coste se estima en unos 3.000 millones de euros.
«La ejecución del proyecto convertirá España en el primer ‘hub’ de hidrógeno renovable del mundo al incorporar los primeros ejes de la red troncal nacional que permitirán conectar los centros de producción de hidrógeno verde con la demanda doméstica y las dos interconexiones internacionales con Francia y con Portugal», subrayan desde el Ministerio para la Transición Ecológica.
Impulsado por los gobiernos de España, Portugal y Francia, el H2Med incluye dos infraestructuras transfronterizas, una entre Celorico da Beira (Portugal) y Zamora, y otra, submarina, entre Barcelona y Marsella (Francia), que están promovidas por los respectivos transportistas y gestores de los sistemas gasistas: Enagás por la parte española, REN por la portuguesa, y GRTgaz y Terega por la francesa. El trazado submarino será de unos 400 kilómetros. Ambos tramos estarán unidos a la columna vertebral que va de Huelva a Gijón y de aquí a Cataluña.
Esta infraestructura, anunciada a bombo y platillo por el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, para intentar tapar el fracaso sufrido con el MidCat –el gasoducto que cruzaría los Pirineos y que ha sido rechazado tajantemente por el presidente francés, Enmanuel Macron–, cuenta con el beneplácito del sector gasista español, aunque algunos expertos cuestionan su viabilidad.
Incertidumbres
En primer lugar, porque los países implicados no han confirmado un calendario del proyecto. Además, han surgido importantes incertidumbres en relación con la finalidad, la demanda, la tecnología, los costes, la financiación y la necesidad general del mismo, subrayan.
La construcción de este hidroducto para transportar hidrógeno verde a Francia a largo plazo se basa en el supuesto de que España y Portugal podrán producir suficiente hidrógeno renovable
Celorico da Beira
Huelva
Zamora
Puertollano
Cartagena para satisfacer la demanda interna y tener un excedente para la exportación. Ambos países han aumentado su generación de energía renovable, pero esto podría no ser suficiente, según la Hydrogen Science Coalition.
«Si se construye este hidroducto, será un gasto innecesario pagado con fondos públicos que no aliviará la actual crisis del gas y, por el contrario, agravará aún más los costes para los consumidores de energía. Los dirigentes de Francia, España, Portugal y otros países implicados deben evitar que el H2Med se convierta en otro proyecto fallido convertido en activo varado y pagado por consumidores como el
Marsella
Barcelona
Posibles almacenes de hidrógeno H2med - CelZa H2med - Bar-Mar Columna vertebral española del hidrógeno Eje 1 Columna vertebral española del hidrógeno Eje 2
David Cebon, profesor de Ingeniería Mecánica de la Universidad de Cambridge (Reino Unido) y miembro de la Hydrogen Science Coalition, afirma que «si bien es cierto que necesitaremos hidrógeno renovable para acelerar la transición energética, sobre todo para los sectores que ya utilizan hidrógeno ‘sucio’ en la actualidad, estamos justo al principio de desarrollar un suministro de hidrógeno limpio y un caso de uso claro. Esto significa que la cantidad y la ubicación de la futura demanda de hidrógeno sigue siendo enormemente incierta. Vincular la justificación de las nuevas infraestructuras de gas al futuro uso del hidrógeno antes de que tengamos claro de dónde vendrán, tanto la demanda como el suministro de hidrógeno, es irresponsable».
La Hydrogen Science Coalition es un grupo internacional de académicos, científicos e ingenieros independientes que trabajan para aportar un punto de vista basado en la evidencia científica al debate político sobre el hidrógeno.
Inés Bouacida, investigadora de Clima y Energía del Instituto para el Desarrollo Sostenible y las Relaciones Internacionales, explica que «todavía no se sabe si el proyecto seguirá adelante, lo que dependerá de las evaluaciones de viabilidad técnica y financiera de los países implicados (el MidCat fue rechazado por los reguladores franceses, entre otras cosas, por considerarlo poco rentable)». Y añade que «todavía no está claro si será atractivo transportar hidrógeno entre la Península y Francia. La producción de hidrógeno con bajas emisiones de carbono es actualmente casi inexistente y los canales de consumo están todavía en parte por construir, aunque parece claro que el hidrógeno se utilizará principalmente para la descarbonización de la industria. Por lo tanto, las zonas de producción y de consumo están aún en fase de definición, lo que dificulta la planificación de las infraestructuras de transporte».
Se calcula que las nuevas líneas submarinas de transporte de hidrógeno cuestan unos 7,1 millones de dólares estadounidenses por kilómetro. La longitud de la tubería H2Med podría variar entre 300 y 400 kilómetros, por lo que esta tubería podría costar aproximadamente 3.000 millones de euros.
El coste y la financiación del proyecto aún no están claramente definidos. La construcción del H2Med es costosa y requiere el respaldo financiero de los compradores para alcanzar la Financial Investment Decision (FID).
Compradores a largo plazo
Las industrias de hidrógeno limpio de Europa y Asia destacaron en una mesa redonda de Bloomberg NEF celebrada recientemente los tres factores principales que retrasan sus FID: la necesidad de encontrar compradores a largo plazo para el hidrógeno limpio, las complicadas normas de concesión de licencias de energías renovables y la espera para captar toda la financiación disponible.