Los duros de ETA entran en campaña para marcar el paso al PNV y Bildu
han solidarizado con él son Jon Kepa Preciado, Orkatz Gallastegi, Mikel San Sebastián, Aitor Cotano, Dani Pastor y Jesús Mari Etxebarria, todos ellos en la prisión alavesa, y Patxi Ruiz, en la de Pamplona. La organización radical Tinko informó además que Jon Mirena Sampedro y Oskar Barreras también tenían intención de «rechazar» las bandejas de comida en la cárcel de Basauri (Vizcaya), pero no llegaron a declararse en huelga de hambre.
Aunque con el paso de las horas lo que en un principio pareció un órdago a lo grande al Gobierno vasco y al abertzalismo oficial fue oliendo cada vez más a farol. Tanto es así que apenas 24 horas después del inicio del ayuno varias organizaciones afines anunciaban el fin de la protesta. En sus redes sociales también presumían de haber doblegado al Gobierno vasco. La asociación Tinko –que defiende la amnistía para los presos de ETA– hablaba de «compromiso» del Gobierno vasco para adjudicar a Etxeberria una celda individual y de los «resultados» obtenidos gracias a la «lucha» y la «unidad».
Sin embargo, fuentes de Instituciones Penitenciarias del Gobierno vasco niegan que haya existido ningún compromiso con este preso. Aseguran a ABC que fue Etxeberria el que decidió por voluntad propia abandonar la huelga de hambre. Al parecer, comunicó su decisión después de un vis a vis con su pareja y de que unos análisis médicos arrojaran algún dato alterado.
Según esas mismas fuentes, su situación tampoco ha variado desde que ha dejado la protesta. Continúa en el módulo de ingresos, donde se le está aplicando el artículo 75 del reglamento penitenciario. Esto implica que tiene limitados algunos derechos, como las visitas o el tiempo en el patio, y continuará así hasta que se libere algún habitáculo individual, como ocurre con otros presos. No dudan además de calificar la huelga de «caprichosa». Según ha podido saber este periódico, algunos de los presos que se han unido a esa protesta habrían realizado compras de comida en el economato de la prisión, como frutos secos, patatas fritas o jamón.
Salto cualitativo
En cualquier caso, aunque el pulso no haya durado ni 24 horas, sí supone un salto cualitativo en las acciones de los presos disidentes que apoyan la violencia de ETA. Hasta ahora sus acciones se limitaban a protestas individuales, pero con este gesto han demostrado su capacidad para organizarse. Resulta especialmente significativo, además, que llegue cuando falta apenas un mes para las elecciones del 28M, en las que EH Bildu espera un gran resultado.
Es por ello que son muchos los analistas que han entendido la protesta como un pulso directo contra el abertzalismo oficial. Hasta ahora los de Otegi siempre habían tratado de minimizar la capacidad de influencia de los grupos disidentes. En diciembre de 2020, por ejemplo, Sortu, partido mayoritario en la coalición independentista EH Bildu, se desvinculó de la huelga de hambre protagonizada por Iñaki Bilbao, alias ‘Txikito’. «No tiene ningún sentido ni recorrido», aseguró entonces. Ayer optaron por responder con silencio a la acción conjunta de los presos del ala dura, en un intento de que la polémica quede en segundo plano. El gesto también busca no azuzar a las bases de esos grupos críticos con su nueva hoja de ruta. No es descartable que esos sectores hagan un llamamiento a la abstención en los comicios municipales y forales del País Vasco –que no autonómicos– ante la falta de sintonía con Otegi. La abstención de ese electorado, sobre todo votantes jóvenes, podría lastrar las buenas perspectivas electorales de Bildu.
También fue una jornada de nervios en el Gobierno vasco. Prueba de ello es que todas las informaciones relacionadas con esta protesta se canalizaron desde las más altas esferas del gabinete de la Consejería de Justicia. Es la primera gran protesta coordinada del entorno más radical de ETA a la que hace frente el Ejecutivo vasco desde que asumió las competencias penitenciarias. A la vista del ruido mediático logrado, no es descartable que sea el preludio de otros conatos similares.