La Mezquita-Catedral de Córdoba adquiere un cuadro inédito de Alonso Cano
▸ El lienzo ‘Jesús atado a la columna’ ha sido adquirido de una colección particular de una familia sevillana
Una imponente pintura obra de Alonso Cano se custodia ya el interior de la Mezquita-Catedral de Córdoba. El Cabildo Catedralicio ha adquirido de una colección particular a herederos de los Condes de Aguilar de Sevilla ‘Jesús atado a la Columna’. Un lienzo de altísimo valor artístico que data de la primera etapa del artista granadino formado en Sevilla poco después de entrar al estudio de su maestro, Francisco Pacheco, en torno a 1615-1626, donde también estuvo el que fuera luego su yerno, Diego Velázquez.
El Cabildo Catedralicio de Córdoba busca ya un emplazamiento que esté «a la altura» de esta obra, pero que a buen seguro lucirá en un lugar especial desde el que pueda contemplarse en la Mezquita-Catedral. El vicario general y canónico del Archivo-Bibliotecario Adjunto, Jesús Daniel Alonso, historiador y doctor en Historia y Bienes Culturales de la Iglesia en Roma, ha detallado a ABC la intrahistoria de esta obra de buen tamaño (1,65 x 1,11 metros) hasta ahora inédita de este Cristo en el momento que es despojado de su túnica y atado a la columna.
Para este experto en patrimonio del Cabildo, «esta obra que es de devoción -por eso el fondo es oscuro con la intención de que de destaque la figura de Cristo- recrea el instante en el que Jesús es despojado de estas vestiduras, antes de la flagelación y el semblante viene a reflejar el momento en el que Jesús dice «hágase en mí su voluntad». El lienzo hasta ahora ha estado en manos de la misma familia sevillana por herencia desde el siglo XVIII en que ya aparece inventariada, pero no fue hasta su restauración en 2007 cuando fue certificada su autoría a Alonso Cano.
Esta pintura a priori aparentaba tener similitudes tanto con una obra de Pachecho como de Cartucho, todos de principios del siglo XVII. Igualmente en un estudio de comparación llegó a cotejarse con obras de Juan del Castillo, con el que comparte importantes conexiones, según recogían las investigaciones. Sin embargo, la figura de Cristo guardaba relación con la que aparece en la negación de San Pedo del Museo de Bellas Artes de Sevilla (hacia 1665). Esta se ha vinculado a su
vez con el pequeño ‘Cristo atado a la columna’ (38 x 18) de al puerta del sagrario del retablo mayor de Santa María la Blanca en La Campana (Sevilla), pintado, este sí, por Alonso Cano hacia 1631. Atendiendo a la cronología, se demostró que la tablita de la Campana de Cano es anterior a la obra de Castillo. Entre las curiosidades de esta obra, Jesús Daniel Alonso señala que, aunque es un cuadro muy temprano —sería veinteañero cuando lo pintó, ya que llegó al taller de Pacheco con 15 años—, el tratamiento del paño de pureza y de la túnica sobre el suelo «recuerdan al joven Velázquez, con el que Alonso Cano compartía escuela con Francisco Pacheco». Esta forma de pintarlos, abunda este historiador doctor
en arte sacro, se parece mucho a los que aparecen en ‘San Juan Evangelista en la isla de Patmos’, de Velázquez, que se encuentra en la National Gallery de Londres (hacia 1618).
Para estos expertos, se evidencia en esta obra la influencia del joven Velázquez, que fue su compañero y amigo en la escuela de Francisco Pacheco, toda vez que este había comenzado a trabajar por cuenta ajena tras aprobar el examen de maestría el 14 de marzo de 1617.
Esta obra de ‘Jesús atado a la columna’ salió a subasta el pasado otoño, pero quedó desierta, fue retirada y adquirida por un precio que no ha sido revelado por el Cabildo Catedral para ser expuesta próximamente .