Netanyahu busca apoyo de los aliados en su respuesta a Irán
▸ Occidente cierra filas en torno a un Estado judío que pide sanciones contra el régimen islámico
Israel busca estrechar lazos con la comunidad internacional para hacer frente al cambio de estrategia de Irán, que a partir de ahora responderá de manera directa a los ataques de Israel como lo demostró el sábado por la noche. El ministro de Exteriores, Israel Katz, contactó con 32 países por carta para pedirles que impongan sanciones al programa balístico del régimen islámico y designen a la Guardia Revolucionaria «organización terrorista». Además de la respuesta militar, Katz encabeza «una ofensiva diplomática que exige estos castigos para contener y debilitar» a su enemigo. Irán lleva décadas sometido a sanciones de todo tipo por lo que este movimiento israelí no despertó mayor preocupación entre sus dirigentes.
Todas las críticas recibidas por Israel en las últimas semanas debido a su estrategia en Gaza se han silenciado desde el fin de semana y, por ahora, Occidente cierra filas en torno al Estado judío tras el lanzamiento de
más de trescientos drones y misiles desde Irán. La participación activa de los ejércitos de Estados Unidos, Reino Unido y Francia en la noche del sábado simbolizó la alianza para proteger a Israel. Ahora Katz pide sanciones para Irán y sus aliados le piden «contención» a Benjamin Netanyahu para que la situación no escale. El problema es que deberán ser más efectivos en su presión que durante los últimos seis meses en los que Netanyahu no ha escuchado ni siquiera a Joe Biden.
El gabinete de guerra se reunió por
tercera vez en tres días en Tel Aviv y las filtraciones a la prensa estadounidense indican que el ataque israelí sería «limitado» y extensible a «objetivos clave fuera de Irán», en un intento por evitar un choque más amplio. Israel ha atacado en innumerables ocasiones objetivos vinculados a la república islámica en la región y sus servicios de Inteligencia también han golpeado dentro de Irán, pero esta vez para mantener el factor de disuasión debería lanzar un ataque contundente y dentro de las fronteras de la república islámica. Una operación que hasta ahora no ha realizado.
El Ejército israelí cuenta con los medios suficientes para responder a Irán, aunque lo tendrá que hacer sin el apoyo de Estados Unidos, según adelantó Washington. El problema al que se enfrentan es que «Irán reaccionará en cuestión de segundos (…). Ya no habrá un espacio de doce o trece días entre un ataque del régimen sionista y nuestra poderosa respuesta. Los sionistas ahora deben calcular en segundos, no en horas», aseguró el número dos de Exteriores iraní, Ali Bagheri Kani. Las palabras de Teherán ya no son simples amenazas altisonantes como lo eran hasta el sábado, ahora los israelíes han comprobado que la amenaza es real.
Armamento no sofisticado
En el ataque del sábado los iraníes emplearon drones Shahed-136, similares a los que emplea Rusia en Ucrania, y misiles de segunda y tercera generación como los modelos Paveh, Emad, Rezvan y Sejjil. Este no es el armamento más avanzado del arsenal iraní, que cuenta con misiles hipersónicos y drones mucho más sofisticados, aunque no al nivel de los medios con los que cuenta Israel.
El Estado judío trata de forzar una coalición antiiraní. El portavoz de las Fuerzas Armadas de Teherán, general Abolfazl Shekarchi, amenazó con «cortar los pies con fuerza» a todos aquellos países, «incluidos Estados Unidos, Gran Bretaña, Francia y Alemania (…) que apoyen a Israel en una aventura militar contra Irán». Los mandos iraníes insisten en que ellos no quieren una guerra a gran escala y que con la operación del sábado dan por zanjada su venganza por el bombardeo israelí contra su consulado de Damasco el pasado 1 de abril.