Antiviolencia impide a los hinchas de Betis y Sevilla acercarse a los autobuses
▸ La medida se produjo tras varios incidentes en los que resultaron heridos miembros de la Caballería
La Subdelegación del Gobierno era un hervidero de actividad ayer al coincidir varias reuniones importantes de trabajo porque la primavera sevillana, si algo tiene, es una intensa agenda de eventos que conllevan dispositivos de seguridad numerosos. Una de esas reuniones fue para definir el operativo que se desplegará de cara al derbi de fútbol que enfrentará este fin de semana a los dos equipos de la ciudad e el Benito Villamarín.
En la rueda de prensa posterior, el subdelegado del Gobierno, Francisco Toscano, fue preguntado por los motivos que impiden a las aficiones del Betis y del Sevilla acercarse a los autobuses que trasladan a los clubes a los estadios sevillanos; una imagen habitual que se ven en otras ciudades y que años atrás también se producía en Sevilla.
Toscano desveló que hace algo más de un año, la Comisión Antiviolencia pidió a ambos clubes y a la Policía Nacional que adoptara medidas para impedir que se volvieran a repetir incidentes que acabaron por afectar a miembros de la Caballería del Cuerpo Nacional que suele escoltar a los autobuses hasta su llegada a los estadios.
«No es una decisión caprichosa sino operativa del Cuerpo Nacional de Policía que hace un análisis tras el llamamiento de la Comisión para llevar a cabo una serie de recomendaciones», recalcó Toscano, que aseguró que en uno de los incidentes que hizo mover ficha a la Comisión Antiviolencia hubo incluso lesiones por quemaduras producidas por bengalas y otros artefactos pirotécnicos. Una situación de altísimo riesgo de la que se temía que pudiera ir a mayores.
Burbujas de seguridad
«No es que no se puedan acercar a los equipos; lo que ocurre es que alrededor de los estadios se establecen unas burbujas de seguridad. Fueras de esas burbujas, los aficiones se pueden acercar manteniendo siempre una distancia mínima de seguridad. En el caso del Real Betis, que ejerce de equipo local en esta ocasión, el hotel del equipo está prácticamente dentro de esa burbuja de seguridad, que empieza desde la calle Holanda. Además, hay calles muy estrechas en las que no es viable que haya un agolpamiento de personas», informó el subdelegado del Gobierno, quien admitió que esas recomendaciones de Antiviolencia se circunscribían a los dos equipos sevillanos.
El dispositivo de seguridad diseñado para este partido, declarado de alto riesgo, es prácticamente el mismo de los últimos años. El peso del operativo lo llevará el Cuerpo Nacional de Policía que aportará 390 efectivos. Por su parte, la Policía Local desplegará 100 funcionarios, que se encargará principalmente de vigilar el botellón en los alrededores del estadio y en la zona de Heliópolis, donde los vecinos se han quejado reiteradamente de los problemas que se originan cada jornada de fútbol.
Dispositivo derbi
El operativo se activará, en su fase precrítica, el sábado con dos zonas de atención preferente: los aledaños de los dos estadios de fútbol de los equipos. Esta fase inicial durará hasta las 13 horas del domingo, cuando se entre en la fase crítica, con los momentos previos al partido. En este operativo, participarán agentes de la Unidad de Intervención Policial (UIP), apoyados por las Unidades de Caballería y de Prevención y Reacción (UPR). Habrá servicios de protección en los hoteles de concentración de ambos equipos y del trío arbitral, así como en el posterior acompañamiento de los autobuses de los equipos has
ta su llegada al Villamarín y el acompañamiento y protección de los seguidores del Sevilla FC hasta el estadio del Real Betis.
Una vez comience el partido, se controlarán tanto el interior como el exterior del Villamarín, los alrededores
del recinto y el acceso de los aficionados al interior del recinto deportivo, que permanecerá bajo la supervisión de las distintas unidades de la Policía Nacional hasta finalizar el partido.
El subdelegado del Gobierno, Francisco Toscano, aseguró ayer que «todo el perímetro del estadio, así como las inmediaciones de Heliópolis, se mantendrán bajo vigilancia desde el desalojo del estadio y durante toda la noche para evitar altercados» especialmente entre los hinchas más radicales, aunque Toscano insistía en el «buen hacer de ambas aficiones».
Cerca de medio millar de agentes de la Policía Local y Nacional se desplegarán este fin de semana con motivo del partido