Un día menos para cerrar este tedio
▸Los de Quique caen con polémica en la última jugada; cuanto antes avance la planificación del próximo Sevilla, mejor
Cayó el Sevilla de Quique en Villarreal (3-2) rompiendo su buena dinámica de las últimas semanas. El partido, tenso, vibrante y no exento de polémica, se plantó en el descuento con empate a dos en el marcador, fruto del doblete de En-Nesyri y los tantos de los locales Sorloth y Mosquera. Cuando la igualada ya parecía inamovible, el ariete noruego decidió el choque en la última acción con un cabezazo en el que pudo cometer falta sobre Kike Salas. Lo empujó a dos manos en el salto... No es lo importante. No es para alarmarse. La derrota es poco trascendente para un equipo que, por fortuna, ya está salvado, aunque el mal trago no se lo quita nadie a un grupo de profesionales hastiado por los tropiezos que poco a poco parecía levantar cabeza.
No perdían los nervionenses desde el choque contra el Celta en el SánchezPizjuán (1-2) del pasado 17 de marzo. La cara amarga del fútbol ha vuelto a aparecer para ellos y su entrenador en La Cerámica ante un oponente de enjundia que exprime sus contadas opciones europeas, algo que por cierto ya es matemáticamente imposible para el Sevilla. Porque no por esperado deja de ser noticia: los números confirman que once temporadas después el club no estará presente en competiciones europeas. Quedan todavía tres jornadas de liga y todo el mundo en Nervión desea que este suplicio de campaña acabe cuanto antes. Eso sí, la entidad debería aprovechar el tiempo ganado a la salvación para acelerar su planificación deportiva y que no se le amontone más el ingente trabajo que tiene por delante, empezando por la primera gran decisión a tomar: ¿Se confía en Quique para la próxima temporada o se va a firmar a otro técnico? El madrileño dijo en la previa del partido con el Villarreal que cualquier decisión errónea suya o mal resultado podría alterar dinámicas. Lo mostrado ante el conjunto del submarino amarillo no ayuda, desde luego.
En el inicio del choque, Sorloth desperdició dos clarísimas y el Sevilla respondió adelantándose en el marcador. Díaz de Mera decretó pena máxima por manos claras de Kiko Femenía en un salto con Suso. La jugada ofreció pocas dudas. Con gran temple, EnNesyri transformó el 0-1 para su equipo desde los once metros. Nada pudo hacer Jörgensen ante la buena ejecución del marroquí… y eso que adivinó la trayectoria del balón. El goleador aparecía, pero el contexto no estaba siendo nada cómodo para los de Nervión. Los locales, de hecho, no tardarían mucho en igualar la contienda. Con En-Nesyri precisamente fuera del rectángulo de juego mientras era atendido por un golpe, el Villarreal se echó al ataque para aprovechar la superioridad numérica y logró castigar al Sevilla. Como no, fue Sorloth el que se impuso de nuevo por arriba para batir esta vez de manera impecable a Nyland. Ramos estuvo ‘blandete’ marcando al noruego.
Con el electrónico en tablas, el partido se abrió más si cabe. El último tramo de la primera parte se encomendó
La derrota confirma matemáticamente que once temporadas después el club no estará presente en competiciones europeas
al intercambio de golpes en las áreas. Y ahí salió ganador el Sevilla, mucho más efectivo. Navas, que ya había provocado con un centro suyo el penalti del primer gol, se sacó otro pase espectacular desde la derecha para el segundo tanto de En-Nesyri. Enorme el capitán palaciego, que demuestra por qué a sus 38 años estará salvo sorpresa en la Eurocopa. Y titánico Youssef En-Nesyri. En la fea temporada sevillista, su delantero se ha erigido en estrella y en codiciadísima pieza del mercado: 19 goles en todas las competiciones para el marroquí, 15 de ellos en LaLiga. Todo un lujo.
En el intermedio Quique Sánchez Flores no movió un varal. Pidió inteligencia a los suyos para llevar al Villarreal a su terreno. Ocurrió que a nadie le cogió por sorpresa que los locales salieron en tromba en busca de nivelar la balanza como fuera. La reanudación del choque fue en efecto un asedio del equipo amarillo contra los de Quique. Hubo llegadas de mucho peligro de Akhomach o Cuenca, y Nyland sacó a relucir su mejor versión con varias intervenciones de enorme mérito ante Baena, Guedes y Traoré.
El planteamiento sevillista tornó en rácano, y tuvo su castigo: en el minuto 83 el central Mosquera sorprendió a la zaga nervionense rematando un centro lateral que superó a Nyland para establecer el 2-2. Otra vez Ramos no llegó a tiempo. No fue el mejor día para el de Camas. Ahí tuvo el Sevilla una pequeña reacción, con un balón al palo de En-Nesyri y otra gran ocasión de Dodi Lukebakio que desbarató Jörgensen.
La tensión se prolongó hasta el final, donde ocurrió de todo. El VAR anuló primero un penalti favorable al Sevilla por supuestas manos de Capoue y acto seguido invalidó un gol de Terrats para los locales por fuera de juego. Bien corregidas las dos acciones. Lo que no evitó nada ni nadie fue la derrota del Sevilla, que se consumó dolorosamente en el descuento con un no menos polémico gol de Sorloth. El ariete del Villarreal mandó con la testa al fondo de las mallas el gran servicio de Baena. Los sevillistas reclamaron falta del noruego en su remate sobre Kike Salas… el empujón en el aire pareció claro, pero ni Díaz de Mera ni el VAR observaron nada punible en la acción del noruego. Derrota cruel… que acabe esto ya.