ABC (Toledo / Castilla-La Mancha)
Una fragata acompañará a un portaaviones de EE.UU. en 2019
El Gobierno aprueba el alistamiento para superar este año las pruebas de la US Navy
La fragata española Méndez Núñez (F-104) se prepara este año para superar las pruebas que la US Navy realiza a las armadas de otros países con el objeto de que puedan integrarse en los despliegues de sus portaaviones.
El Consejo de Ministros ya aprobó a finales de año la partida necesaria para el alistamiento, adiestramiento y certificación de la fragata española, equipada con el sistema de combate estadounidense Aegis (Lockheed Martin), compatible con la defensa antimisiles de destructores de la US Navy que también acompañarán al portaaviones.
«Atendiendo al interés nacional, con el objetivo de mejorar la interoperabilidad con la Marina de los EE.UU. y para adaptarnos a nuevos requisitos de seguridad, de acuerdo con las previsiones y finalidad del Convenio de Cooperación para la Defensa entre el Reino de España y los EE.UU., se prevé asignar una fragata para que participe en un nuevo despliegue conjunto, en 2019, con un Grupo de Combate de Portaaviones de la Marina de los EE.UU.», esgrimía el acuerdo del Consejo de Ministros.
Ejercicio en Norfolk
El objetivo es que un ejercicio final en Norfolk (Virginia) acredite a la fragata Méndez Núñez y su dotación para participar en el despliegue naval que le llevaría en 2019 a formar parte del grupo de combate del portaaviones Abraham Lincoln (CVN-72).
La F-104 española, con base en Ferrol (La Coruña), se uniría al grupo naval de la US Navy a su paso por el Mediterráneo: además del portaaviones, el denominado «Carrier Strike Group» suele ir acompañado por otros 3-5 buques (destructores y cruceros) y algún submarino. «Luego se cruzaría el canal de Suez y el despliegue principal se realizaría en la zona del Índico y Pacífico», informaron a ABC fuentes de la Armada Española.
Comenzando en febrero de 2019, y tras un periodo de 4-5 meses desplegada con el portaaviones Abraham Lincoln, la fragata española regresaría a España a finales de ese años tras dar una vuelta el mundo cruzando el Pacífico, canal de Panamá y Atlántico. «Aún está por definir la agenda de esa travesía. Eso sí, mientras despleguemos con el grupo de combate del portaaviones estadounidense seguiremos el plan de su misión», explican.
Esta no es la primera vez que una fragata española F-100 acompaña a un portaaviones estadounidense en su despliegue o maniobras. Hubo tres participaciones en 2005, 2011 y 2012.
Además del interés operacional, esta será una oportunidad para que la US Navy compruebe de nuevo la operatividad de las fragatas F-100. Navantia, en alianza con el astillero estadounidense Iron Bath Works, aspira a construir 20 nuevas fragatas para la US Navy. Otros países de la zona asiática también podrían comprobar de primera mano la operatividad de este exitoso buque ya exportado a Noruega o Australia.