ABC (Toledo / Castilla-La Mancha)
Un Pou tamaño ballena
Andrés Lima dirige al actor catalán en el Teatre Goya barcelonés en esta adaptación del libro de Herman Melville
Josep María Pou es Ahab en el espectáculo «Moby Dick» que inundará, literalmente, el Teatre Goya a partir de este viernes. «No podría ser otro», afirma Daniel Martínez, presidente de Focus, que cree a ciegas en esta producción. El director Andrés Lima maneja el timón de este barco «que navega por un mar bíblico». Para él, «“Moby Dick” es la historia de una obsesión. Queremos ver la caza de la ballena desde una mirada del ser humano contra la muerte». Lima plantea la historia como «la agonía de un suicida; la novela está siempre entre el ying y el yang”» Y no pasa por alto que Ahab puede ser un héroe clásico. «La pieza es una fascinante metáfora de la lucha del ser humano contra sí mismo y la naturaleza», avanza Pou.
Este proyecto bebe del texto de Juan Cavestany basado en la novela de Melville. «La particularidad de esta versión es que Cavestany da más importancia a la parte narrativa», apunta Lima, que tiene muchas ganas de ver cómo reacciona el público. Quien también está ansioso es Pou, que alaba la capacidad de Cavestany de «coger las mil páginas de Melville y subirlas a un escenario».
El protagonista de la función ve mucho paralelismo con el «Rey Lear» que interpretó hace años y se atreve a decir que «el Capitán Ahab es el personaje que Shakespeare olvidó escribir». «Es un personaje muy shakesperiano, un personaje por encima de lo humano», constata el actor, para quien no hubiese sido lo mismo meterse en el pellejo del personaje de Melville sin sus interpretaciones del personaje shakespeariano y de Orson Welles. «Sin ellos dos este Ahab no sería lo que es, ni tampoco sin los múltiples personajes que he interpretado en cincuenta años de carrera», constata.
Hipnotizar al público
La tripulación del ballenero está interpretada por Jacob Torres y Oscar Kapoya. «Nosotros –destaca el primerotenemos que transmitir el alma del marinero al que le apasiona su oficio de ballenero, un oficio que ya no existe». La escenografía y el vestuario de Beatriz San Juan tienen mucha fuerza. El espectador verá una gran ventana con vistas al mar; un mirador que refleja los pensamientos del Ahab.
Las fotos de promoción auguran un Pou inmenso. «Espero que consigamos hipnotizar al público; yo estoy entusiasmado de celebrar mis cincuenta años de profesión con “Moby Dick”», asegura. Tenemos al capitán pero, ¿dónde está la ballena?. «El quid de este libro es que Moby Dick está omnipresente pero nunca se ve; no queremos develar si en esta versión aparece o no, pero sí que podemos anunciar que habrá unas pantallas gigantes donde se proyectarán algunos vídeos».