ABC (Toledo / Castilla-La Mancha)
El FBI investigó si Trump trabajaba para los intereses de Rusia
La decisión interna fue controvertida y surgió a los pocos meses de la llegada del presidente
Con el paso del tiempo y el progreso de la investigación de la trama rusa por parte del fiscal especial Robert Mueller, emergen los detalles sobre los tumultuosos primeros meses de la presidencia de Donald Trump. Mueller investiga si hubo un complot entre la campaña del ahora presidente de EE.UU. y Rusia durante las elecciones de 2016 que le llevaron a la Casa Blanca y si Trump obstruyó a la justicia en la investigación de esa interferencia.
Ahora también se sabe que las autoridades de EE.UU. fueron más allá y montaron una investigación de contrainteligencia contra su presidente: tras el controvertido despido del entonces director del FBI, James Comey, esta agencia de investigación trató de averiguar si Trump estaba trabajando para Rusia para perjudicar intereses estadounidenses, ya fuera de forma deliberada o inconsciente.
La operación de contrainteligencia la ha revelado «The New York Times» y surgió a la vez que las autoridades investigaban si el despido de Comey tenía implicaciones criminales por tratarse de una obstrucción a la justicia. Según revela el diario neoyorquino, la decisión de emprender una investigación de contrainteligencia contra Trump fue controvertida dentro del FBI y surgió después de que el presidente diera muestras en dos ocasiones de que el despido del director de la agencia estaba relacionado con la investigación de la trama rusa.
Sospechas
Las investigaciones de contrainteligencia difieren de las criminales en que su principal objetivo es descubrir si un rival extranjero –en este caso, Rusia– trata de ejercer su influencia o dañar a EE.UU y si hay estadounidenses involucrados en ello.
Durante muchos meses, la inteligencia estadounidense tuvo sospechas para investigar una posible relación entre Trump y Rusia. El entonces candidato había mostrado simpatía durante la campaña hacia Rusia y Vladímir Putin, había hecho un llamamiento a Moscú para que hackeara los emails de su rival, Hillary Clinton, y había suavizado la postura del partido republicano contra las agresiones rusas en Ucrania. Al mismo tiempo, varios de sus colaboradores cercanos en la campaña eran objeto de investigación del FBI por sus lazos con Rusia.
Sin embargo, fueron dos actuaciones de Trump tras el despido a Comey lo que acabó por convencer al FBI de la investigación de contrainteligencia: la carta de despido, en la que Trump insistió en mencionar la trama rusa, y una entrevista en NBC, donde relacionó la salida de Comey con ese asunto.
James Comey Trump no dudó en relacionar el despido del jefe del FBI con las acusaciones de su afinidad con Putin