ABC (Toledo / Castilla-La Mancha)
Mar Torres esperaba poetas en Instagram
LA ESPUMA DE LOS DÍAS
EROTISMO Rihanna ha hecho un spot, ahorrando en sujetador, con vistas a ella
misma
Mar Torres resultó novia guadiana de Felipe Juan Froilán. Después de aquello, se subió a la noticia porque se hizo unos birlibirloques de cirugía estética, y parecía otra, quizá porque lo era. Lo mismo para celebrar la soltería, abrió a los públicos su perfil de Instagram, y ahí lució esas novedades, a bordo de un biquini escueto, o sea, apoteósico. Diríamos que pasó de mona a monísima, coincidiendo con la inauguración de su Instagram para todos. Ahora, en ese escaparate ha salido muy vestida de corsetería de jirón, y le han dicho de todo, incluso guapa. Y se nos ha echado Mar a llorar, porque esperaba mayores amabilidades. Igual Mar venía pensando que al Instagram de lencería se asoman sobre todo poetas.
C Jon el tiempo que la esplendorosa Elsa Pataky se ha tomado en fingir una carrera podía haber hecho una carrera de verdad. oaquín Cortés y Mónica Moreno han sido padres, por segunda vez. Estuve con Joaquín, hace poco, y le vi sereno, resituado, maduro. Ya no reñido con la vida y sus pleitos. Pero ambicioso en su arte, como él dice. Enseguida, saldrá a bailar de macho con alas en el WiZink Center, en Madrid.
Si nos ponemos serios, Isabel Preysler no reaparece, sino que se aparece, como una virgen de cóctel o un fantasma femenino de finísima lámina. Desde hace un tiempo, se ha hecho profesional de la mañana, por avatares biográficos, y es de salir poco, lo que no invalida que la prensa la espere, a cualquier hora. Ahora cumple setenta años, pero eso da un poco igual, porque ella cumple portadas, y no años. Yo he sostenido siempre que la Preyler lleva el photoshop incorporado, antes del photoshop mismo, porque es mujer chinofilipina, y no pierde nunca el perfil de porcelana oriental y casi adolescente. La noticia, en Isabel, es siempre una estampa de Isabel, con photoshop natural, o bien del otro, según digan las cátedras de peluquería. Aprovechando que es su cumpleaños, pienso que Isabel Preysler no tiene relevo, como gran personaje de portada, y ni sus hijas, tan monísimas, pueden sucederla, porque ya vemos que la sucesión es ella misma. Tamara es un bombón de anuncio, y habla como haciéndose siempre el lío con el chicle sin azúcar que no usa. Ana Boyer es novísima, y hay poco dato aún para una glosa en condiciones, incluida su vida con el tenista Verdasco. Tamara no da razones, sino risitas. Ana lleva mucha vida de lancha, incluso en invierno. Pero Isabel Preysler las derrota a las dos juntas. Mucho me sospecho que esto no le gusta a Isabel que yo lo arriesgue, porque ella ve en Tamara un futuro de esplendor, y a lo mejor no va en el pronóstico sólo una pasión de madre. Preysler prepara el relevo en Tamara, pero yo veo que ella se viene sucediendo a sí misma. Ha cumplido setenta, y luego ha cumplido con Mario Vargas Llosa ya muchos años de matrimonio, pero sin matrimonio. De modo que son dos enamorados famosos que aún no han decidido arruinarlo todo con una boda. Gentes como ellos no tienen relevo. Son lo contrario al popular trincón trimestral, charlatán y de concurso.
22.10 Antena 3
EE.UU. 2003. Acción, atracos. 104 m. Director: F. Gary Gray. Intérpretes: Mark Wahlberg, Edward Norton, Charlize Theron, Donald Sutherland. Gray rehace la película de Peter Collinson sobre una banda de ladrones con un veterano líder y un atracador listo. Hay un gran atraco en perspectiva, un traidor en el grupo y una chica cañón que rima con Theron…, todo en su lugar, muy rítmico y espectacular. Y la escena de los MiniCooper, claro.
22.25 Paramount
Alemania. 2018. Intriga, terror. 132 m. Director: Christian Alvart. Intérpretes: Moritz Bleibtreu, Lars Eidinger. Policíaco tenso y sugestivo: un policía forense encuentra dentro de un cadáver un mensaje críptico y el número de teléfono de su hija, raptada por un asesino en serie. La intriga y el terror se cruzan en un guion retorcido, que, además de tensarse como un insultante dedo corazón, propone un buen duelo interpretativo entre actores no demasiado vistos.
23.25 La 1
EE.UU. 2006. Comedia romántica. 105 m. Dir: Peyton Reed. Con Jennifer Aniston, Vince Vaughn, Jon Favreau. Lo típico es la situación: una pareja que se amaba, ahora se detesta y tienen que compartir casa convirtiéndola en un ring. También lo es, en cierto modo, la potencia de pegada de sus protagonistas, y Aniston y Vaughn convierten la comedia en un nudo corredizo alrededor del cuello del espectador. Lo atípico: la soltería puede no ser un mal negocio.