ABC (Toledo / Castilla-La Mancha)
Plus Ultra oculta a su plantilla las cláusulas del rescate
La aerolínea diseña una ambiciosa temporada estival tras recibir la ayuda pública
El rescate de Plus Ultra sigue envuelto en secretismo. El Gobierno todavía no ha explicado por qué considera estratégica a una compañía que apenas contaba con una cuota de mercado del 0,1% en 2019. Y la empresa tampoco ha desvelado a sus trabajadores los sacrificios que ha ofrecido para acceder a la ayuda estatal de 53 millones de euros que ha recibido.
El único cambio que conocen sus trabajadores es que la compañía se deshará de uno de sus cuatro aviones. El resto del plan de viabilidad que ha presentado la empresa al Gobierno es un misterio. Pese a que distintos sindicatos aseguran que la relación con la empresa «es fluida» y se producen encuentros entre ambas partes varias veces al mes, por el momento la compañía no ha planteado ningún tipo de ajuste a su plantilla.
Es más, determinadas organizaciones sindicales abren la puerta a que la empresa revierta ahora parte de los recortes ejecutados en el último año. Cuando estalló la pandemia y la actividad de la compañía cayó drásticamente por las restricciones a la movilidad, Plus Ultra impuso, además de varios ERTE, una rebaja salarial progresiva a sus trabajadores que contemplaba recortes de hasta el 45% de los sueldos más altos. Un ajuste que la plantilla quiere revertir ahora que la SEPI ha accedido a conceder a la empresa un préstamo de 53 millones de euros. Fuentes sindicales aseguran que la compañía no se cierra a esta posibilidad «si este verano se consigue caja suficiente».
Al igual que el resto del sector aéreo, Plus Ultra tiene puesto el foco en la temporada estival. La intención de la empresa, si las restricciones lo permiten, es operar dos conexiones semanales con Quito, Lima y Caracas, recuperando así gran parte de la actividad que perdió desde la primavera pasada. En 2020, la actividad de la aerolínea se redujo al máximo y la empresa se centró en realizar vuelos con China para traer a España material sanitario.
Esta situación agravó la delicada situación económica de Plus Ultra, que ya se encontraba al borde de la quiebra a principios de 2020. Los trabajadores de la aerolínea son conscientes de ello, y saben que sin el polémico rescate la viabilidad de la compañía sería imposible. Por eso han cerrado filas y han obviado el secretismo que rodea al plan de viabilidad presentado por el grupo al Gobierno.
Hace un par de semanas, los tripulantes de cabina justificaron el rescate por la «multitud» de vuelos realizados con China y destacaron que la gran mayoría de los 400 trabajadores de la compañía contaban con un contrato indefinido.