ABC (Toledo / Castilla-La Mancha)
...y congelaciones a otros
solo un mes después se convocarían unas elecciones anticipadas que le han sorprendido con el pie cambiado precisamente por esa estrategia sanchista de castigo a Madrid.
El convencimiento socialista de que hay que subir los impuestos en la comunidad central es tal que, pese a los esfuerzos de Gabilondo por disimularlo, esta semana, en plena precampaña, la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, recuperó su ofensiva fiscal y anunció la creación de un grupo de expertos para elevar los impuestos de Patrimonio y Sucesiones el próximo mes de enero. Un movimiento buscado por el Gobierno desde hace meses pero convertido en promesa para ERC en noviembre, como peaje por su apoyo a los Presupuestos.
No fue la única afrenta que las nuevas cuentas lanzaron a Madrid. La inversión pública territorializable quedó prácticamente congelada con un ascenso del 0,24 por ciento hasta 1.250 millones para toda la región. La misma partida, sin embargo, creció un 50 por ciento para Cataluña hasta los 1.999 millones. Tras este reparto, la región central se coloca la tercera en cuanto a inversión pública, recibiendo un 10 por ciento del total, frente al 16,5 por ciento que irá a Cataluña y el 17,1 por
Sanidad impidió a Madrid pasar a la fase 1 de la desescalada alegando el criterio de un comité que no existía. En octubre, usó datos previos para imponerle un estado de alarma cuando sus cifras mejoraban
La región central será la tercera en cuanto a recepción de inversión pública con 1.250 millones, apenas un 10 por ciento del total tras un alza del 0,24 por ciento
La presidenta madrileña nunca se lo ha puesto fácil al jefe del Gobierno pero el plan de acoso y derribo de éste comenzó el día en que ella llegó a la Puerta del Sol. Han pasado 20 meses desde aquel 19 de agosto de 2019 y Díaz Ayuso nunca ha sido convocada a una reunión oficial en Moncloa. A su predecesor, Ángel Garrido, solo le costó seis meses recibir una atención que está prácticamente estandarizada para los presidentes autonómicos. En su estrategia, el jefe del Gobierno no respeta protocolos de cortesía ni se ablanda con las circunstancias más difíciles. Ya puede caer Filomena, que el fuego arrase bosques enteros o que la DANA cause estragos en la región. El líder socialista no se deja ver visitando la Comunidad, como sí lo ha hecho cuando Baleares, Cataluña, Murcia, Valencia, Andalucía o Canarias se han visto golpeadas por episodios similares. El que tuvieran que pasar ocho meses de pandemia antes de que Sánchez se acercara a un hospital madrileño, y que lo hiciera el día en que Díaz Ayuso estaba fuera de la región deja poco que añadir.
Fue precisamente la pandemia lo que disparó abiertamente las hostilidades entre la presidenta madrileña y el jefe del Gobierno.