ABC (Toledo / Castilla-La Mancha)
Lagarde advierte de que la variante Delta puede «frenar la recuperación»
El BCE mantiene los tipos en el 0% y la compra de activos hasta marzo de 2022
La presidenta del Banco Central Europeo (BCE), Christine Lagarde, lanzó ayer una seria advertencia contra el impacto económico de la variante Delta, que calificó de «una fuente creciente de incertidumbre». En concreto, la dirigente francesa comenzó reconociendo que aunque la recuperación económica en la Eurozona «va por buen camino» la nueva variante del Covid podría «frenar la recuperación en los servicios, en particular en el turismo y la hostelería». En cualquier caso, el BCE decidió mantener los tipos de interés de referencia en el 0%. Además tampoco modificó la tasa de facilidad de depósito que continuará en el 0,5% ni la facilidad de préstamo, que estará en el 0,25%. Los programas de compras también continuarán. Preguntada por todo ello, Largade confirmó que no se había debatido en el consejo de gobierno del banco emisor sobre ninguna modificación y que, los actuales programas, se mantendrán hasta al menos marzo de 2022.
Con este telón de fondo continuista, Lagarde se mostró partidaria de que los gobiernos sigan «apoyando» la expansión de la economía. Sobre el nuevo objetivo de inflación, que abre la puerta a aceptar alzas puntuales por encima del 2% de forma transitoria, la presidenta del BCE apuntó que evaluarán las condiciones de financiación y las perspectivas de inflación. «Tendremos nuestras nuevas previsiones en septiembre y será mejor ver qué proyecciones hay para la inflación», especificó. Es decir, en el BCE, casi nadie quiere endurecer la política monetaria prematuramente.
¿Tipos bajos hasta 2024?
La mayoría de los analistas consultados concluyeron sobre la reunión de ayer, que la política monetaria acomodaticia seguirá vigente más tiempo del inicialmente previsto. Para Gilles Moëc, economista jefe del Grupo AXA Investment Managers, apostar porque la inflación alcance el 2% ‘con bastante antelación’ antes de tomar una decisión «es como decir que no habrá subida de tipos antes de 2024, como mínimo». Una opinión compartida por Esty Dwek, head of Global Market Strategy de Natixis IM Solutions: «El resultado de este nuevo objetivo de inflación implica una política acomodaticia durante más tiempo». En opinión de esta analista, «esto es positivo para los mercados y para los periféricos».
Otros expertos mantienen que, en septiembre, comenzarán los cambios. El gestor de carteras de Pimco Konstantin Veit argumenta que en septiembre, «el BCE empezará a preparar el final del PEPP (programa de compras por la pandemia) y un aumento del APP regular en 2022».