La luz dispara el IPC hasta un nivel máximo en nueve años

Los precios se situaron en una tasa interanual del 3,3% tras subir cuatro décimas en el mes de agosto

Los precios siguen disparados y sin freno con el consiguiente impacto en el bolsillo del consumidor, que hace frente ahora a una de las ‘cuestas de septiembre’ más empinadas de la última década. El IPC subió en agosto cuatro décimas en tasa interanual respecto a julio y se situó en el 3,3%, el valor más alto desde septiembre de 2012, cuando alcanzó un porcentaje del 3,4%, según los datos avanzados publicados ayer por el Instituto Nacional de Estadística (INE). En el comportamiento interanual del IPC destaca la subida de los precios de la electricidad, que cierran agosto en máximos históricos y con la previsión de seguir elevados hasta final de año.

A la escalada de precios ha contribuido en gran parte el elevado coste de la electricidad en el mercado mayorista, que precisamente marcará hoy un nuevo récord, hasta los 130,53 euros el megavatio hora (MWh). Los precios están desbocados por el peso de la luz y la subida de los alimentos. De hecho, la tasa de variación anual de la inflación subyacente –el índice que no contabiliza los frescos ni los productos energéticos– apenas aumentó una décima, hasta el 0,7%. Los derechos de emisión de CO también tocaron ayer los 61,01 euros por tonelada, lo que supone un 87% en el acumulado del año, respecto a los inicios en 32,70 euros. Por su parte, los precios del gas se situaron en 50,20 euros el MWh frente a los 18,2 euros del pasado diciembre, según información de Mibgas. La escalada de precios parece no tener fin en los últimos meses, una tendencia que se acentúa al comparar las cifras con las de 2020, un año marcado por los confinamientos y la pandemia de Covid-19. «Se trata de un problema de difícil resolución en un momento donde nuestra economía está aún en cuidados intensivos con una elevada tasa de paro y a la espera de los fondos europeos y nuevas subidas de impuestos, pues la estabilización de los precios no solo depende de nosotros sino de las decisiones del BCE, así como la inflación de determinadas materias primas que se está generando a nivel mundial», interpreta Juan Carlos Higueras, analista económico y profesor de EAE Business School.

Tal y como informó ABC, la subida de la luz también se ha trasladado a la cesta de la compra y ha provocado un efecto dominó en los precios de venta de los alimentos. Desde la Organización de Consumidores OCU ya han avisado de que la alimentación se está comportando de forma inflacionista y auguran una subida global de los pre

La tasa de inflación subyacente –que no incluye alimentos frescos ni energía– apenas subió una décima, hasta el 0,7%

cios del 1,8% en este apartado. A esto se une un efecto ‘ bola de nieve’ sobre los precios, que se podría mantener e incluso agravar en el corto plazo. «La llegada de los fondos europeos puede cronificar la subida de precios que sería consecuencia del esperado crecimiento económico, lo que, a su vez, reduciría el incremento del PIB en términos reales por debajo del esperado», explica Higueras. Además, «ante una elevada inflación, los ahorradores podrían decidir gastar su dinero aumentando la demanda de bienes y servicios» y presionando aún más el encarecimiento de precios, alerta el analista económico de EAE.

Además, en el octavo mes de 2021, el Índice de Precios de Consumo Armonizado (IPCA) situó su tasa interanual en el 3,3%, cuatro décimas más que la registrada el mes anterior. Por su parte, el indicador adelantado del IPCA subió un 0,4% en tasa mensual. El INE publicará los datos definitivos del IPC de agosto el próximo 14 de septiembre.

Exportaciones

El INE también avanzó ayer que el Índice General de Precios de Exportación de los productos industriales registró un aumento interanual del 10,4% el pasado julio, un punto y medio por encima de la tasa registrada en junio y su mayor subida desde el inicio de la serie, en enero de 2006. Por su parte, los precios de importación subieron un 12,9% en comparación con julio de 2020, tasa más de dos puntos y medio superior a la del mes anterior y la más alta también desde 2006.

Con las cifras del séptimo año, los precios de las exportaciones marcan siete meses consecutivos de avances, mientras que los de las importaciones suman cinco meses de tasas positivas. Todos los sectores industriales impactaron al alza en el incremento de esta tasa anual. Entre ellos, destacaron los bienes intermedios, cuya variación del 13,5%, casi dos puntos por encima de la del mes anterior, es consecuencia del encarecimiento de la fabricación de productos básicos de hierro, acero y ferroaleaciones. A esta partida se suma la de la energía, con una tasa anual del 88,4%, casi ocho puntos superior a la de junio.

Distintas patronales ya han alertado de una subida de precios industriales, por la escasez de los suministros y componentes y la congestión de los puertos y el tráfico de mercancías. En la OCU también mostraron hace unos días su preocupación por la fuerte demanda de materias primas, unido a las dificultades de la industria para proporcionarlas y consideraron que esta ‘tormenta perfecta’ « va a suponer un i mportante aumento de los precios». Al respecto, el director general de la patronal de las industrias internacionalizadas Amec, Joan Tristany, advertía que el precio de los contenedores se ha llegado a triplicar y que esto impacta sobre las exportaciones.