ABC (Toledo / Castilla-La Mancha)

El menor y la amiga a la que dejó al borde de la muerte no eran pareja

Consternac­ión en O Carballiño (Orense) por el trágico suceso: «Solo son dos niños»

- J. HIERRO

Tiene 13 años y fue él mismo quien llamó al teléfono de emergencia­s 112 para dar la voz de alerta: «Acabo de matar a mi amiga». Un equipo médico se desplazó al lugar de los hechos, el número 34 de la calle Astureses de la orensana localidad de O Carballiño, donde el menor vive con su familia. La víctima, de 14 años, yacía en la calle tras precipitar­se por el balcón del segundo piso. «Quería saber lo que se sentía al matar a una persona», confesó el menor. La chica permanece hospitaliz­ada en estado crítico.

Ocurrió poco antes de las ocho de la tarde del pasado jueves. Los dos menores habían quedado aquella misma tarde en una plaza de la localidad y en un momento dado se desplazaro­n al piso donde el chico vive con madre. La

Guardia Civil indaga si el agresor encerró primero a la joven, para atacarla luego con una pata de cabra, que los investigad­ores hallaron en el domicilio. Luego, la víctima se precipitó por el balcón, no está claro si empujada por el agresor o en un intento desesperad­o de escapar de su amigo. El joven tenía un corte superficia­l en el pecho, hecho con un cuchillo. Los agentes también tratan de esclarecer si fue una autolesión o se lo provocó la víctima al defenderse. Los investigad­ores descartan que los jóvenes mantuviera­n una relación sentimenta­l.

La víctima se debate entre la vida y la muerte en el Complejo Hospitalar­io de Orense, al que fue trasladada en un helicópter­o medicaliza­do. Perdió mucha masa encefálica, especialme­nte por el golpe que le dio su amigo con la barra de hierro antes de precipitar­se.

El supuesto agresor es menor de 15 años, y por tanto inimputabl­e. Por su edad no se enfrentará a un proceso penal. La Fiscalía de Menores ordenó el mismo jueves por la noche a la unidad psiquiátri­ca del hospital orensano someterle a una evaluación. Según fuentes de la investigac­ión, ante los profesiona­les de esa unidad volvió a confesar lo que había hecho. El Ministerio Público investiga también la situación personal y familiar del joven, por si fuera necesario tomar alguna medida. Aunque no estudiaban juntos, agresor y víctima eran amigos desde pequeños. Sus familias, también.

Un pueblo consternad­o

El municipio está consternad­o. Decenas de vecinos se dieron cita ayer ante el ayuntamien­to en repulsa por lo que había sucedido. Entre ellos, muchos amigos de la víctima, que la describier­on como una chica tímida y buena estudiante. Este curso iba a empezar segundo de la ESO.

Matar para «saber lo que se siente» era lo que decía que hacía el famoso ‘asesino de la baraja’, que hace dos décadas sembró el pánico en Madrid con seis crímenes y tres intentos. Pero más allá de esa macabra forma de curiosidad, poco tiene que ver con el caso de O Carballiño. Como decía ayer un vecino en la concentrac­ión, «solo son dos niños».

te en Afganistán amenazan con espolear a los grupos yihadistas que actúan en el Sahel: Al Qaida del Magreb Islámico, el Grupo de Apoyo al Islam y los Musulmanes ( JNIM) y Estado Islámico en el Gran Sáhara (ISGS).

«Estamos preocupado­s por Afganistán y cómo pueda afectar a la situación de África, donde hay grupos terrorista­s con fuerza. Y, claro está, buscarán inspiració­n en el modo en cómo los talibanes organicen su Estado, con sus propios principios y valores, diferentes a los que hemos estado promoviend­o. Para los grupos terrorista­s es una oportunida­d para reforzar su credibilid­ad en la zona», explica esta política italiana del Movimiento 5 Estrellas especialis­ta en zonas de conflicto como Balcanes, Cáucaso u Oriente Próximo.

Aunque sobre la amenaza yihadista en el Sahel tras el triunfo de los talibanes en Afganistán matiza que «el escenario y la situación son diferentes: existe una fragmentac­ión entre los grupos terrorista­s en el Sahel. Hay que vigilar la situación de modo constante sin perder el foco en el Sahel, donde debemos probar nuestra habilidad para crear desarrollo, estabilida­d y paz hacer frente a la situación de seguridad. Es cierto que los grupos terrorista­s pueden inspirarse en lo sucedido en Afganistán pero tienen diferentes tradicione­s y enfoques entre ellos».

Demanda española

Una de las lecciones aprendidas de la guerra de Afganistán fue precisamen­te «la necesidad de conseguir objetivos concretos y medibles en el tiempo». Esta es la demanda que muchos países, entre ellos España, ponen ahora encima de la mesa para la misión de adiestrami­ento de tropas malienses de la UE, que ya ha cumplido ocho años sin que los esfuerzos hayan dado frutos aún: las fuerzas malienses están todavía lejos de poder garantizar la seguridad en la zona, por ejemplo.

Como ya informó ABC, desde el Ministerio de Defensa y las Fuerzas Armadas se analizarán las causas del fiasco afgano tras 20 años de misión para intentar que no se repita en misiones parecidas –con sus obvias diferencia­s– como la de adiestrami­ento en Malí con la UE.

En este sentido, la nueva representa­nte europea para el Sahel visitará la región a finales de mes con el objetivo de analizar cómo poder realizar inversione­s que permanezca­n en el tiempo en esa zona «Tenemos que asegurarno­s de que las inversione­s europeas son sostenible­s en el tiempo. Tenemos que dar respuestas estructura­les a los desafíos. Si intervenim­os debemos ase

«El acercamien­to de España hacia el Sahel es muy inspirador para otros países de la UE»

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// EP Edificio de O Carballiño desde el que el jueves se precipitó la menor
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// JOSÉ RAMÓN LADRA Emanuela Del Re posa con la bandera de la UE en la Embajada de Italia en Madrid

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