ABC (Toledo / Castilla-La Mancha)
Jon Rahm acaba el año con récord en Dubái
El vizcaíno gana por tercera vez en Jumeirah y suma su quinto Rolex Series
Después de vivir una temporada de lo más extraña (con dos victorias pero con la sensación generalizada de que no había sido nada buena), Jon Rahm se presentaba en la final de Dubái sin muchas expectativas. Todo el protagonismo l o acaparaban Matthew Fitzpatrick y Rory McIlroy, que se disputaban el liderazgo europeo, mientras que el español ocupaba un discreto segundo plano. Y eso que sumaba dos victorias anteriores en Jumeirah (2017 y 2019) que dejaban claro que este campo no tiene secretos para él.
Como quien no quiere la cosa, el vizcaíno se fue acercando a la cabeza el viernes (66 golpes), la asaltó el
sábado (65) y ayer domingo no tuvo más que tirar de su gran conocimiento del juego para hacerse con la victoria sin despeinarse (67). «La verdad es que estoy muy orgulloso de cómo he manejado las cosas porque no he estado muy fino desde l as salidas; pero en los putts cortos he estado muy bien y ahí ha estado la clave», resumió. En concreto superó dos momentos clave en los hoyos 13 y 14 que le dieron la tranquilidad necesaria para ganar con veinte bajo par, dos golpes menos que Alex Noren y Tyrrell Hatton. Mientras, Jorge Campillo y Adri Arnaus (-10) fueron novenos con sendas grandes actuaciones en el emirato.
De manera que Jon sumó su tercera victoria en Dubái (su quinto Rolex Series), una cifra que nadie ha logrado hasta ahora. Esa historia que ya se está forjando en el golf continental la está consolidando también en el nacional, pues junto a los tres Open de España que atesora y a su Open Estados Unidos ya acumula nueve títulos del Circuito Europeo. En el palmarés iguala al mítico Manolo Piñero en el quinto puesto de siempre después de Seve Ballesteros (56), Chema Olazábal (23), Miguel Ángel Jiménez (21) y Sergio García (16).
«Espero que ya nadie me diga que he tenido una mala temporada», espetaba Jon Rahm con cierta retranca nada más concluir su participación en la final del DP World Tour. Acaba el año como número cuatro mundial y europeo y deseando volver a casa, porque «no hay que olvidar que he tenido otro hijo y eso cambia las cosas».