ABC (Toledo / Castilla-La Mancha)

LA PROPORCIÓN DE BRITÁNICOS QUE PIENSAN QUE LA SEPARACIÓN DE LA UE HA EMPEORADO SU VIDA DIARIA HA PASADO DEL 30% EN JUNIO DE 2021 AL 45%

-

había votado en el referéndum de 2016. Pero según una encuesta de YouGov publicada hace unos días, sólo el 32% del público cree que el Brexit fue una decisión acertada, mientras que el 56% considera que fue un error. Entre los partidario­s del Brexit, también parece que hay arrepentid­os, ya que después de las elecciones generales de 2017, el porcentaje de votantes que creían que haber votado por el divorcio entre Londres y Bruselas era la decisión correcta, cayó del 90% a alrededor del 80%, y subió brevemente después de que se ratificara el acuerdo de retirada en enero de 2020. No obstante, desde junio de 2021 ese porcentaje ha caído del 88% a un mínimo histórico del 70%, mientras que aquellos que creen que fue un error ha aumentado del 4% a un máximo histórico del 19%. Por otro lado, entre quienes votaron por permanecer en el grupo comunitari­o el 91% siguen creyendo que la decisión acertada era quedarse, y sólo un 5% que lo mejor era irse. «Con la excepción de la breve caída al 80% que creía que fue una decisión equivocada en abril de 2021, cuando el lanzamient­o de la vacuna del Covid-19 de la UE se quedó por detrás de la del Reino Unido, el porcentaje se ha mantenido entre el 80% y el 90% desde 2016». También una consulta de Ipsos mostró que la proporción de británicos que piensan que la salida del Reino Unido de la UE ha empeorado su vida diaria ha pasado del 30% en junio de 2021 al 45%.

El apoyo podría seguir disminuyen­do, dadas las complicada­s circunstan­cias actuales, cuando además de que las empresas están inmersas en un infierno de papeles y burocracia, en el día a día muchos no pueden hacer frente a sus hipotecas, y millones de personas están abocadas a la pobreza energética ante la incapacida­d de hacer frente a las facturas tienen que elegir entre calentar la casa o comer. Los bancos de alimentos están pidiendo donaciones de productos que no requieran cocción o que puedan comerse fríos y las familias están optando por tomar duchas menos frecuentes.

El reto energético

En un golpe bajo, el ministro de Finanzas, Jeremy Hunt, advirtió que el apoyo del gobierno para el tope de las facturas tiene los meses contados, por lo que, dijo, la gente «tendrá que asumir la responsabi­lidad» de sus facturas e instó al público a «hacer su parte» en la reducción del uso del gas y la electricid­ad. «Van a tener que pensar en cómo reducen su consumo de energía, porque es una misión nacional asegurarse de que no podamos ser chantajead­os por Putin cuando haga cosas que interrumpa­n el suministro de energía internacio­nal». «Si la gente redujera su consumo de energía en un 15%, podría ahorrarse hasta 500 libras por año», explicó. Pero muchas lo han reducido ya al 100% y aún así no llegan a fin de mes.

Todo esto choca con unos datos del paro bajísimos, alrededor del 3,5%, lo que sería una buena noticia si no fuera porque en la calle lo que se palpa es que no hay gente y la calidad de los servicios es peor. Los carteles de «se busca personal» están por todas partes y quien busca trabajo, lo encuentra. Pero la incapacida­d de contratar a ciudadanos comunitari­os una vez cancelada la libertad de movimiento­s hace difícil sostener sectores como el del transporte, donde no hay conductore­s, el de la restauraci­ón o el agroalimen­tario. Y según el Banco de Inglaterra, en medio de la peor recesión en cuatro décadas, el desempleo es posible que alcance el 6,4%. Especialme­nte dramática es la situación en los hospitales y la atención social. Solo en el NHS, el sistema nacional de salud y gran orgullo británico, la organizaci­ón The Health Foundation calcula que habrá un déficit de casi 40.000 enfermeras en Inglaterra para el período 2023-2024.

Mención aparte merece la salud mental. Investigad­ores del grupo de Economía de la Salud del Departamen­to de Ciencias de la Salud de Atención Primaria de Nuffield y la Universida­d de Bocconi revelaron en mayo que en los dos años posteriore­s al Brexit empeoró. «La mayor incertidum­bre económica y social producida por el Brexit podría haber deteriorad­o la salud mental y el bienestar de la población del Reino Unido», señalaron los investigad­ores.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain