Barceló devolverá anticipadamente al Estado los 320 millones del rescate a Ávoris

► Se convertirá en la primera que liquida sus obligaciones con el fondo de apoyo

Ávoris es ya al cien por cien propiedad de Barceló. El grupo turístico balear tiene el visto bueno de Competencia, la SEPI y los bancos para hacerse con el 49,5% restante de la empresa que hasta el momento estaba en manos de Globalia. Ahora, sin el obstáculo de la familia Hidalgo, la compañía quiere deshacerse de golpe de la deuda de 320 millones que tiene con el Fondo de Apoyo a la Solvencia para Empresas Estratégicas (Fasee), creado por el Gobierno tras el estallido de la pandemia.

Así lo confirman fuentes de la SEPI a ABC. Desde el holding público, gestor del Fasee, señalan que ya han recibido solicitud de amortización anticipada y que la pretensión de Barceló es la de devolver la ayuda en un solo pago, como así adelantaba ‘Expansión’. Un retorno al que habría que sumar los intereses de la deuda, cuya cantidad por el momento se desconoce.

Aunque según consta en las memorias de 2021 de las cuentas del Fasee, el tipo de interés de la deuda será del 2% fijo durante los años que dura el apoyo en el caso de los préstamos ordinarios (156,8 de los 320 millones en esta modalidad para Ávoris) y en el caso del participativo (163,2 millones) será de un 1% variable sobre el nominal pendiente si la empresa acaba el año en beneficio. Por lo que el grupo de agencias de viajes podría zanjar los intereses del adeudo haciendo frente solo a los del año en curso. Ávoris tenía de margen hasta 2027 para devolver los 320 millones, pero de consumarse este movimiento despejará de golpe más de la mitad de su pasivo global, que se sitúa en alrededor de los 500 millones. Fuentes de la empresa señalan que esperan completar la devolución de la ayuda a la SEPI durante este final de año o a principios de 2023.

De esta forma, Ávoris se convertirá en la primera de las 30 empresas rescatadas en devolver las ayudas y esquivar el control del Estado. El gigante de la distribución turística nació de la fusión de las agencias de viajes de Globalia y Barceló a finales de 2020. Una unión que se realizó en buena parte gracias al apoyo de la SEPI, en un momento en el que las restricciones sanitarias de la pandemia paralizaban el mundo y las agencias de viajes apenas registraban actividad.

Con la reactivación del turismo este año y tras cerrarse un ERE este verano que afectó a 200 empleados de Ávoris, Barceló decidió dar un paso al frente en el control del grupo y quedarse con la parte de Globalia. Un movimiento al que apenas pudo oponer resistencia Juan José Hidalgo, pues la deuda de Halcón Viajes se descontroló por unos litigios anteriores a la fusión del grupo.

La complicada situación financiera de la matriz de Air Europa dificultaba la atención de estas obligaciones y finalmente Hidalgo decidió canjear el 49,5% de su accionariado en Ávoris por la parte proporcional de su deuda total en el grupo de agencias de viajes, algo más de 200 millones. La operación se saldó con el pago simbólico de un euro por el lado de Barceló.