IBERDROLA

LA ELÉCTRICA ESPAÑOLA DEBERÍA VOLVERA PENSARENUN

PROYECTO COMOELQUE TUVOCON EL

DESAFÍO

Voy a seguir centrando mi columna en la parte positiva de la vela y de todo lo que la rodea, que haberlas ahílas, como se diría en mi querida y añorada Galicia con respecto a las meigas.

Resulta que por una buena conjunción de astros, durante las dos últimas semanas he sido invitado por Iberdrola directamente a presenciar el partido inaugural de la «roja» en la Eurocopa de Polonia y Ucrania, y también por Iberdrola, aunque vía Agustín Zulueta, para acompañarlos a la primera incursión en una regata del campeonato sudamericano de un S40 español, concretamente a la regata de Ilhabela (Brasil), tercera prueba de su campeonato.

Obviamente el barco no era el habitual con el que el Team Iberdrola compite en el Campeonato Europeo de la clase. En Brasil el barco era alquilado, pero la tripulación, casi la misma con la que compite en Europa, habida cuenta que había que adaptarla a la normativa que rige allí. Portando sus características velas con las que navega en Europa. Y servidor ha aprovechado para echarles una mano desde el punto de vista mediático con algunas crónicas y bolitos.

Después de estar en los dos lugares y agradecer de antemano a Iberdrola el detalle muchos son los recuerdos y los pensamientos que me han venido a la cabeza. Pienso que es bueno que Iberdrola esté con la selección española de futbol, así lo han decidido sus ejecutivos y sus razones tendrán.

Pero lo que nunca debería dejar Iberdrola es portando sus colores verdes en un barco de vela compitiendo en los lugares donde la eléctrica española tenga intereses empresariales. Aquí en Brasil he visto al personal encantado con nuestra presencia y con nuestros colores e imagen de marca, y óiganme, que aquí las composiciones y diseños de marcas corporativas patrocinadoras de la flota son sencillamente espectaculares, pero la nuestra, la de Iberdrola lucía con luz propia y créanme que no son exageraciones típicas de mi Andalucía natal.

Creo que la transición que la eléctrica está realizando en esta enorme y profunda crisis, es modélica, y sus proyectos de vela deben estar en manos de quien lo están en estos momentos. Me imagino que por ley de vida esta crisis finalizara algún día y entonces Iberdrola debería desembarcar en otro gran proyecto parecido en su conjunto global al de la Copa América de 2007 en Valencia, enmendando los errores y proyectando las nuevas formas que seguro esta crisis dejara de nuevo definidas. Y mientras Pombo haciendo tonterías, como la de no apoyar a Íker y Xavi como abanderados de España.