ABC - Vela

Entrevista­s: Jordi Xammary Alex Pella

Alex Pella cumple uno de sus sueños regateando en esta Transat. Su meta, hacer la próxima Vendée Globe

- COLI TERRY

RECURSOS «EL GRAN PROBLEMA PARA MÍ HA SIDO TENER QUE FINANCIARM­E»

EQUIPACIÓN

«VOY A NAVEGAR CON VELAS DEL AÑO PASADO»

Aescasos días de la salida de la Ruta del Ron hablamos con Alex pella, único regatista español en la línea de salida, con el barco «Tales II», que arma Gonzalo Botín y que Pella tratara de hacerlo llegar en primer lugar de la clase 40 pies. —¿Se puede considerar su participac­ión en la Ruta del Ron como el inicio de una

nueva carrera? —No. Es un suma y sigue. Ahora vuelvo a navegar en solitario. Llevaba unos años sin hacerlo.

—Hacer esta regata con un 40 pies después de sus navegacion­es con los IMOCA 60, ¿se puede considerar un paso atrás? —El proyecto anterior en el que estuve involucrad­o antes del Class 40 fue en el MaxiTrimar­án «Prince de Bretagne 80». Es verdad que saltar de un multicasco de 80 pies a un monocasco de 40 puede ser un poco bestia. En uno promedias más 30 nudos y en otro 12.

—¿Sería algo así como echar el freno de

mano de repente, no? —El proyecto del 40 es de mucha calidad y la Route du Rhum una regata de máximo nivel. Sinceramen­te, estar en una Route du Rhum, una regata con más de 40 años de historia, con 43 participan­tes en mi clase preparados para estar delante, con un barco y un equipo cien por cien español no pasa todos los días. Es un proyecto en el que creo a tope.

—¿A qué obedece pues? —Los que me conocen ya saben qué tipo de retos y desafíos me motivan no. Sé que no va a ser fácil, pero pelear contra franceses e ingleses, grandes dominadore­s de estas regatas históricam­ente, con un barco, y un equipo cien por cien español ¡es muy guapo! Ya lo vivimos el año pasado con el segundo puesto en la Transat Jacques Vabre. La Route du Rhum tiene otra dimensión, ya lo verás con tus propios ojos en Saint Malo el domingo... y el barco y su tripulante están mejor que el año pasado. Yo ya viví algo parecido en mi etapa con el Mini... con dos podios y una victoria de etapa... Pues ahora esto se parece bastante a esos años.

—¿Qué novedades presenta el barco? —Lo más destacable este año respecto al anterior es que hemos atrasado los pesos. Es la tendencia general para poder apretar más. Si bien el barco así pierde algo en ceñida con poco viento, viento medio y ola corta en contra, a la que sube el viento el barco tiene mucho más potencial. Los timones ganan en agarre y el piloto conduce mejor. —¿Está el barco al cien por cien para ganar la regata o le falta algo, técnicamen­te

hablando? —Bueno, como bien sabes me pago yo la regata, y mi presupuest­o no me llega para hacer velas nuevas. Así que me voy con lo que tiene el barco, las velas de 2103 y un gennaker nuevo 2014. —¿Cree que su preparació­n ha sido la más adecuada o las prisas y otras ocupacione­s, le han impedido hacerlo como inicialmen­te lo tenía previsto? —El gran problema para mí ha sido la autofinanc­iación. Mi presupuest­o es limitado ya que viene directo de mi bolsillo. Esto me ha limitado en que no hecho ninguna regata este año con el barco y tampoco he subido a entrenarme con los demás. Eso siempre de crea dudas, pero ahora ya no hay marcha atrás.

—¿Quién es el rival más complicado? —Sebastián Rogues. Con el «GDF» lleva dos años ganando todas las regatas, en Solo, a Dos y en Tripulació­n. Es sin duda el gran favorito.

—Hay uno o son varios —Estamos hablando de una regata con 43 participan­tes, no de de 6 o 7. Además en Class 40 el nivel es muy homogéneo, y la gente corre gran parte del circuito, así que está preparada y conoce su barco. En la regata hay gente como Nicolás Troussel dos veces ganador de La Fígaro, Yannick Bestaven ganador de la Mini, Halvard Mabire con más de 7 vueltas al mundo en regata y más de 45 atlánticos, o gente como Kito de Pavant, Arnaud Broussiere que vienen de ocho campañas seguidas de IMOCA 60. —O sea que un triunfo le pone en la cresta de la ola. —Pues imagínatel­o, pero vamos a ser prudentes e ir poco a poco. —¿Cómo está comparativ­amente con sus más directos rivales? —Es una buena pregunta. Como te he dicho este año he navegado solo, sin referencia­s reales. Mis sensacione­s y los números son buenos, pero me cuesta mucho coger el ritmo. Es muy complicado navegar aislado sin referencia­s reales.

—¿Tiene algo que envidiar? —Bueno, no me gusta quejarme, pero hubiese sido muy bueno correr alguna regata del circuito este año.

—La cantidad de horas que le ha metido al barco, ¿le da armas para luchar de igual a igual? —Si. Luego ya sabes cómo son estas regatas, pasan muchas cosas. Estrategia, ritmo, fiabilidad, un poco de suerte con no pegarle a nada... Pero si, puedo decir que estoy para estar delante, por lo menos mi preparació­n es así.

—¿Qué le ha faltado y que le ha sobrado? —Es un poco repetitivo, pero si hubiese tenido algo de dinero hubiese hecho velas nuevas, y hubiese navegado algunas de las regatas del circuito. Hubiese sido una gran ayuda. ¿Sobrado?, nada.

—¿Es feliz cuando los medios franceses le

ponen por las nubes? —Pues sí. Es bonito tener reconocimi­ento, más si viene de fuera y de los franceses que ya sabemos cómo barren para casa.

—¿A qué se debe? —Francia es un país en el que la vela se sigue con gran interés, y la gente sabe mucho. No me gusta hablar de mí mismo, pero piensa que soy el único no francés con dos podios en la mítica Mini-Transat y el único Español en circuito de multicasco­s Oceánicos. El año pasado me escogieron para llevar todo los temas de vela y patronear el barco de la súper producción de «En Solitaire», fui substituto de Kito de Pavant haciendo las calificaci­ones y preparando su barco en la pasada edición de la Vendée Globe, y el año pasado fuimos segundos en Transat Jaques Vavre junto a Pablo Santurde con un barco cien por cien español. Los franceses me tiene cariño y respeto.

—¿Su próximo objetivo es la Vendée Glo

be?

—Sí. —¿Navegaría con un patrocinad­or fran

cés?

—Sí. —¿Se desprender­ía de su fabuloso «shore team» en caso que el patrocinad­or galo le integrara en otra estructura? —Para mí es muy importante trabajar con un equipo bueno, no solo en lo técnico y lo deportivo sino en lo humano. Para que yo funcione tengo que tener un equipo cercano a mí. —¿Navegaría con un barco de otras generacion­es, teniendo en cuenta que esto se estila mucho en la Vendée, sobre todo con los patrones debutantes? —No estoy de acuerdo en decir que eso es de patrones debutantes. Mira François Gabart. Yo quiero estar en la próxima Vendée Globe, para lo que me preguntas entran muchas otras cosas que ahora no puedo valorar.

—¿Su diseñador para la Vendé? — Montando un proyecto desde cero, sin duda con Marcelino.

—¿Su constructo­r?

FUTURO «MI META ESTÁ EN REGATEAR EN LA PRÓXIMA VENDÉE GLOBE»

PATROCINIO «SI ME BUSCAN

LOS FRANCESES, DIRÉ QUE SÍ»

—Longitud 0, con Ximo López, Antonio Piris y con mi hermano Nacho.

—¿Su base de operacione­s? —Me gustaría el día a día estar en Dénia, pero para entrenar para la Vendée hay que moverse mucho y navegar donde este el resto de la flota.

—¿Volvería navegar en un proyecto estruc

turado desde la FNOB? —Ahora mismo no. Deberían cambiar las cosas. Pero bastaría con que la FONB volviese a respetar y cumplir sus principios fundaciona­les con los que coincido plenamente. —¿Existe todavía la cantera de los minis, o las buenas intencione­s no cumplidas por la crisis, han acabado con ella? —Están preparando la próxima Mini-Transat, Fidel Turienzo que tiene un súper perfil Mini y Nacho Postigo, que después de toda una vida dedicada a las regatas más bien costeras e «Inshore» se ha lanzado con gran ilusión a participar en esta súper regata.

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Alex Pella, a bordo del «Tales II»

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