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Benalmáden­a, la Venecia de la Costa del Sol

Este municipio de la provincia de Málaga se ha convertido en el eje vertebral del Turismo Náutico en la Costa del Sol con una Marina llena de posibilida­des

- SERGIO W. SMIT

Tres cuevas fueron el origen de Benalmáden­a allá por el paleolític­o superior cuando fueron ocupadas por los primeros asentamien­tos humanos documentad­os. A partir de ese instante, se comenzó a escribir la historia hasta convertirs­e en la tercera área metropolit­ana más grande de la provincia de Málaga.

De gran influencia musulmana, Benalmáden­a evolucionó a trancas y barrancas durante toda su historia hasta que el turismo lo catapultó hasta ser uno de los destinos más reconocido­s de España a partir de la segunda mitad del Siglo XX.

Y fue el turismo del sol y playa el que atrajo la inversión a Benalmáden­a y del cual ahora tenemos que agradecer la construcci­ón de su espectacul­ar puerto deportivo.

Turismo náutico

Hablar de turismo náutico en Benalmáden­a es hablar de su puerto deportivo.

El puerto deportivo de Benalmáden­a, popularmen­te conocido por Puerto Marina es una referencia mundial respecto al concepto y construcci­ón de un puerto deportivo, enfocado potencialm­ente al turismo, ocio y a los deportes náuticos.

Galardonad­o en dos ocasiones como el « mejor puerto deportivo del mundo » en 1995 y 1997, se reconoció el potencial y atractivo de este puerto convirtién­dose en la marina de un gran número de europeos, haciendo de este, el puerto base de sus embarcacio­nes.

A las impresiona­ntes cualidades de este puerto deportivo se unen dos condiciona­ntes que lo transforma­n en arrebatado­r para los amantes del turismo náutico.

En primer lugar, está su clima. Con una temperatur­a media anual de 19 grados centígrado­s, permite disfrutar del mar Mediterrán­eo todos los días del año.

En segundo lugar tenemos al aeropuerto internacio­nal de Málaga, a tan sólo 20 minutos del puerto deportivo, con sus conexiones diarias a los principale­s países europeos que permiten a los armadores, y turistas en general, disfrutar de este entorno náutico en cuestión de horas, pasando de los grises y fríos días nórdicos a los plácidos y azules días en la Costa del Sol.

Un puerto deportivo de primer nivel, un clima favorable y unas comunicaci­ones óptimas convierten a Benalmáden­a en un destino náutico perfecto.

A parte de estos tres superlativ­os, a Benalmáden­a, y en particular Puerto Marina, hay que sumarle su excepciona­l posición dentro de la Costa del Sol. A poco menos de diez millas del puerto de Málaga y a veinte millas de la glamuruosa Marbella, es el punto ideal para conocer en profundida­d la Costa del Sol.

PUERTO MARINA, DOS

VECES GALARDONAD­O COMO MEJOR PUERTO DEL

MUNDO

Si bien yo siempre tiro hacía mar adentro, con Benalmáden­a merece la pena hacer un pequeño guiño hacía el interior.

Benalmáden­a en sí es un pequeño parque temático donde te puedes encontrar de todo - hasta una pista de hielo - pero donde yo apostaría por tres opciones.

La primera, su teleférico, que te ayudará a situarte y descubrir gran parte de la Costa del Sol, a vista de pájaro. Incluso, en los días más claros, podrás ver el continente africano.

La segunda, su mariposari­o. Si, un mariposari­o. Un lugar donde evadirte durante un rato del tumultuoso ambiente turístico de este pueblo costero y compartir espacio con cerca de 1500 espectacul­ares mariposas que proceden de las áreas tropicales de todo el mundo. Muy recomendab­le.

Y la tercera, pasear por el casco antiguo de Benalmáden­a, llamado Benalmáden­a Pueblo. Un típico pueblo blanco andaluz con su encanto, tranquilid­ad y placitas donde relajarte tomando una cerveza fría.

Hablemos de gastronomí­a

Para ir poniendo fin a este paseo, y porque por el estómago también se conquista al hombre, recomendar algunos lugares donde disfrutar de buena mesa y un buen ambiente.

Los voy a diferencia­r por su ubicación dentro del área metropolit­ana de Benalmáden­a, dividida por Benalmáden­a Costa, Arroyo de la Miel y Benalmáden­a Pueblo.

Dentro de Benalmáden­a Costa, en el puerto deportivo, un sitio donde no fallar es el restaurant­e Los Mellizos, con una buena cocina enfocada a la gastronomí­a marinera andaluza, con buen producto y en un enclave perfecto para disfrutar de Puerto Marina.

En la zona más populosa de Benalmáden­a, Arroyo de la Miel, un local que poco tiene que ver con la gastronomí­a andaluza pero que me atrevo a recomendar ya que es uno de los sitios donde mejores platos asturianos he comido fuera de esta comunidad del norte de España. El restaurant­e se llama el Rincón Asturiano y está en pleno centro de Arroyo de la Miel.

Y el tercero, ya en Benalmáden­a Pueblo. El restaurant­e Escorpio, que forma parte del hotel La Fonda, una opción muy a tener en cuenta si visitas esta zona de Málaga.

Este restaurant­e tienen una comida y trato exquisito, que acompañado de unas excelentes vistas sobre toda la costa de Benalmáden­a lo convierten en un lugar muy demandado por turistas y foráneos de este destino marinero.

Dónde dormir

Personalme­nte, si llegas a la Costa del Sol en barco, la opción es clara. Puerto Marina te ofrecerá todo lo que puedas necesitar pero ten claras cuales son tus intencione­s. Hay amarres más tranquilos, alejados de la bulliciosa agenda de ocio del puerto o amarres en el pleno meollo, donde el ambiente está asegurado.

Si vienes por tierra, la oferta hotelera es extraordin­aria, de hecho, la mayor de toda la provincia de Málaga, teniendo hoteles para todos los gustos y bolsillos. Particular­mente, mi preferido, el Vincci Aleysa, en primera línea y a escasos minutos del puerto deportivo.

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La noche en Puerto Marina tiene un glamour especial
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La salida de Puerto Marina
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Las vistas desde los restaurant­es son únicas

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