Destinos que cuidan el futuro
La Unesco declaró 2017 Año Internacional del Turismo Sostenible para el Desarrollo. Elegimos diez destinos en España en los que la conservación del entorno es esencial
Tierras del Ebro: oleoturismo entre olivos milenarios
A veces la tierra habla simplemente a través de su paisaje, como ocurre con los retorcidos y enormes troncos de los olivos milenarios del Territorio del Sénia, ejemplares ya cultivados por los primeros habitantes iberos y romanos. Un paisaje agrario de los más antiguos del mundo poblado desde la Edad del Hierro, como indican sus abrigos rupestres, a los pies de la sierra Godall. Más de 2.000 ejemplares milenarios de árboles, considerados entre los más viejos de Europa, testifican la alianza inquebrantable de sus habitantes con los árboles cuyas aceitunas, solo recogidas cuando caen del árbol, dan el mejor aceite del mundo. Descubrir el bosque mediterráneo intacto, atisbar a sus habitantes naturales más exclusivos como el buitre leonado, la cigüeña negra o el águila real ya es posible gracias a un proyecto de conservación que ha restaurado el bosque y convertido la sabiduría de la dehesa en un ejemplo de vivir de manera sostenible y que, a la vez, beneficia a la biodiversidad. Sendas, observatorios de fauna, miradores, itinerarios guiados, razas de ganado autóctono, cenas bajo las es- trellas y charcas repletas de vida caben en las seiscientas hectáreas de bosque convertido en reserva natural.
Escuaín (Huesca): montañas del quebrantahuesos
El quebrantahuesos vuelve a ser uno de los protagonistas de los Pirineos gracias a su recuperación promovida por la Fundación Quebrantahuesos. Para descubrir a la rapaz podemos conocer el proceso de conservación de la especie en peligro de extinción con una visita a la Estación Biológica Monte Perdido de Revilla. Al día siguiente se realiza excursión guiada por el valle de Escuaín y observación de rapaces que habitan estas montañas enclavadas en el Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido. El segundo día la excursión recorre el espectacular cañón de Añisclo que nos acercará de nuevo a la fauna pirenaica.