Canarias

Un viaje entre cepas y vinos que invita a conocer otra cara de las islas

ás de seis mil hectáreas de viñedo inscritas, que no son muchas. Once Denominaciones de Origen, cinco de ellas en la isla de Tenerife. Cepas registradas hasta los 1.750 metros de altura sobre el nivel del mar. El cultivo de la vid se remonta a cinco siglos atrás y en las últimas décadas la aparición de los Consejos Reguladores ha dado una nueva dimensión al vino de las Islas Canarias. Y también al enoturismo, con muchas bodegas preparadas para recibir a turistas.

Hasta hace relativamente poco tiempo los vinos blancos (principalmente a partir de las uvas malvasía y listán blanco) eran los más reconocidos en el resto de España,

EN CANARIAS HAY ONCE D. O., CINCO DE ELLAS EN TENERIFE

Mcon tres bodegas de gran nivel, como son El Grifo, Los Bermejos y Teneguía, las dos primeras en Lanzarote y la tercera en La Palma. Sin embargo, algunos tintos poseen un nivel envidiable y en esta línea se comenzó a posicionar hace no muchos años Suertes del Marqués, que pertenece al Valle de la Orotava, una bodega familiar nacida en 2006.

Valle de la Orotava es una de las once Denominaciones de Origen que posee Canarias, con tres uvas principales: la citada malvasía (vinos blancos) y listán negro y negramoll ( tintos). Las otras diez son las siguientes: Ycoden Daute Isora, Valle de Güímar, El Hierro, Tacoronte-Acentejo, Abona, Lanzarote, La Palma, Gran Canaria, La Gomera e Islas Canarias.

Además de las islas de Lanzarote y La Palma, la tercera muy posicionada en recibir al turismo enológico es Tenerife y de hecho posee la mitad de las Denominaciones de Origen y la más antigua: Tacoronte-Acentejo. Situada en la zona norte de la isla, es un tesoro diseminado por nueve municipios (Santa Úrsula, La Matanza de Acentejo, La Victoria de Acentejo, El Sauzal, Tacoronte, Tegueste, El Rosario, San Cristóbal de la Laguna y Santa Cruz de Tenerife). Un tesoro encontrado a través de Bodegas Insulares o Bodegas Domínguez, por ejemplo. Y también vive en Tenerife la bodega de Canarias que, quizá, emprendió antes y mejor el camino por el enoturismo: Bodegas Monje, en el municipio de El Sauzal.