Destino responsable y sostenible
León es historia, patrimonio, naturaleza, cultura y gastronomía. Son muchos los atractivos que reúne la provincia, que se ha convertido en un destino turístico imprescindible por su variedad, pero también por brindar al visitante una oferta integrada y respetuosa con los «tesoros» que alberga, unas características que se han tenido en cuenta a la hora de concederle el certificado internacional «Biosphere destination» por parte del Instituto de Turismo Responsable. Se trata de un sello que además de suponer una garantía para el turista que aprecie lo auténtico y profesional, premia la perfecta armonía que existe en León con el entorno, con el ecosistema.
Siete reservas de la biosfera reconocidas por la Unesco (Valle de Laciana, Picos de Eu- ropa, Babia, el Alto Bernesga, los Argüellos, los Valles de Omaña y Luna y los Ancares) sitúan a la provincia como el territorio nacional que reúne más figuras de este tipo. Alberga en su geografía auténticas «joyas» naturales, paisajes en los que merece la pena perderse y en los que la conservación de la naturaleza y la biodiversidad son su seña de identidad. Además, no menos notable es su patrimonio arquitectónico, que el Instituto de Turismo Responsable tilda de «impresionante» por los muchos y variados ejemplos que se pueden encontrar en sus más de doscientos municipios.
«Paisajes culturales»
León es también un destino para el peregrino, con más de 200 kilómetros del Camino de Santiago que discurren por sus pueblos y que atraen cada año a un gran número de personas llegadas de diversos puntos de España y del extranjero que se quedan prendadas por sus rutas. Es además, un lugar de referencia para los amantes de la nieve y los deportes de invierno con dos grandes estaciones de esquí, San Isidro y Leitariegos, y por su cercanía con las de Fuentes de Invierno y Valgrande-Pajares. Mención aparte merece en León lo que la Unesco denomina «paisajes culturales», es decir, las expresiones excepcionales de acontecimientos que son producto del trabajo del hombre en armonía con la naturaleza. Y si se habla de la provincia, tampoco se puede olvidar su rica gastronomía, una despensa en la que prima la calidad y en la que destacan de forma especial productos reconocidos con denominación de origen o indicación geográfica protegida. Este año, además, León ha sido reconocida con la capitalidad gastronómica, una distinción otorgada por la Federación Española de Hostelería ( FEHR) y la Federación Española de Periodistas y Escritores de Turismo ( FEPET) que reconoce a aquel destino turístico más comprometido con la promoción del turismo gastronómico. Son muchos, por tanto, los ingredientes que hacen de León un destino obligatorio, un territorio para conquistar al visitante y en el que la calidad está en el eje mismo de la gestión, donde la salvaguarda del patrimonio cultural y natural se conjugan a la perfección con una oferta capaz de emocionar al turista.