El Mundo Nacional - Weekend - Actualidad Económica
Actualidad Económica y Telva premian a las mejores empresarias valencianas
Rosana Perán, vicepresidenta de Pikolinos; Ángela Pérez, de Health in Code; María Martínez Iturriaga, de Berklee College y Leticia Valera, de Kassumay, las cuatro galardonadas
Mujeres, emprendedoras y líderes en sus campos. Es lo que une a las cuatro valencianas que este año han sido merecedoras de los Premios de Actualidad Económica y Telva a las ‘Mejores Empresarias de la Comunidad Valenciana’, que se entregaron en la capital del Turia con el patrocinio de CaixaBank.2050.
El acto contó con la presencia del presidente de la Generalitat, Ximo Puig; la consellera de Justicia, Gabriela Bravo; la delegada del Gobierno, Pilar Bernabé, y la vicealcaldesa de Valencia,
Sandra Gómez, además de numerosos representantes del mundo empresarial, político y social valenciano.
Las galardonadas han sido Rosana Perán, vicepresidenta ejecutiva de Pikolinos, que ha recibido el Premio a la Mejor Trayectoria Empresarial; la vicepresidenta de Life Science Health in Code, Ángela Pérez, reconocida como la Mejor Empresaria Innovadora; la vicepresidenta del Berklee College of Music y directora ejecutiva de Berklee
Valencia, María Martínez Iturriaga, considerada como Mejor Directiva; y Leticia Valera, Premio Solidaridad y Filantropía por su labor al frente de la ONG Kassumay.
En sus discursos, las cuatro empresarias agradecieron un premio que reconoce el mérito de su carrera y experiencia profesional, por lo que reivindicaron el valor del liderazgo femenino y la necesidad de visibilizar y dar voz a las mujeres. En este sentido, el propio presidente de la Generalitat elogió a las galardonadas por su “lucha incansable para derribar fronteras reales y mentales”, al tiempo que destacó que sus trayectorias constituyen la mejor referencia y un ejemplo para las próximas generaciones de mujeres.
Ximo Puig reclamó, además, una “igualdad en oportunidades efectiva” para hombres y mujeres, para lo cual instó a administraciones, empresas y sociedad en general a sentar las bases que la hagan posible. “Ninguna sociedad puede renunciar a la mitad de su potencial”, afirmó. De ahí que valorase la iniciativa de Actualidad Económica y Telva –a la que se refirió como “sinónimo de modernidad”- por su “contribución a la igualdad”.
¿Las administraciones os están ayudando de alguna forma?
Como Industria Estratégica que somos, no nos sentimos protegidos. Y más dentro de estas discusiones y crisis de soberanía energética. Somos parte de la cadena de suministro y tenemos muy interiorizado el coste de generación eléctrica. Las ayudas son escasas, por no decir que prácticamente inexistentes. Sin embargo, hay que decir que el tope del precio del gas nos está haciendo ganar competitividad frente a otras empresas europeas.
Individualmente, a través de asociaciones sectoriales y clústeres, estamos trabajando desde antes de que explotara esta crisis energética y de materias primas, en asegurar el futuro de la industria europea en nuestro sector. Consideramos que pertenecemos a una industria estratégica y de futuro para Europa y sentimos una falta de empatía por parte de las administraciones. En otros mercados y países existe algún tipo de proteccionismo (Anti-Dumping, aranceles, contenido local… ). Sin embargo, en Europa no se da ninguno de los casos mencionados. Considero que, dado que somos proveedores de componentes para la producción de Energías Verdes, las emisiones de CO2 deberían de ser un factor determinante a la hora de seleccionar un proveedor. Se está comenzando a tratar temas tan importantes como la “Huella de Carbono”, que debe de medir las emisiones de CO2 a la hora de fabricar, el consumo de CO2 ante el suministro de materias primas y el consumo de CO2 en la logística final. Si tuviéramos en cuenta esta Huella de Carbono, seríamos más consecuentes con el objetivo final de reducir de emisiones, estando más cerca del consumidor final y protegiendo aquellos productores que invierten en optimización de sus procesos contaminantes. En definitiva, mataríamos dos pájaros de un tiro: reducción de emisiones y consumidores más cercanos. Por desgracia, esta iniciativa va lenta.
¿Se están parando proyectos porque han dejado de ser rentables?
Sí, claro, por todo lo anteriormente comentado, el precio final de nuestros productos se ha visto incrementado. A su vez, proyectos de nuestros clientes finales que no son rentables en la coyuntura actual, no van a ser ejecutados, por lo que la demanda disminuye.
Pero sí es cierto, que ahora estamos en un periodo de transición hacia nuevos productos y proyectos innovadores que hacen que el futuro a medio plazo sea esperanzador y las perspectivas sean buenas.
No están siendo fáciles las negociaciones con nuestros clientes por el tema de ajustes de precios a la hora de determinar el precio final del proyecto pero, a pesar de ello, estamos llegando a acuerdos.
¿Y qué soluciones veis en el corto plazo?
Para el corto plazo, el margen de maniobra es escaso. Las decisiones y resultados afloran más en el medio plazo. Europa debe tomar decisiones estratégicas con carácter urgente para que energética e industrialmente seamos capaces de tomar las riendas de lo que queremos que ocurra en los próximos años: generar nuestra propia energía de forma sostenible, no depender de energías fósiles y terceros países.
Acabemos hablando del futuro a medio-largo plazo, ¿dices que es más esperanzador?
Sí. Las perspectivas para Sakana son excelentes. Estamos viendo que el mercado se dirige hacia el desarrollo de productos de gran tamaño, algo en lo que somos líderes del sector, además de que ofrecemos un servicio integral, desde el diseño, la fabricación y el transporte. En Sakana estamos preparados para fabricar piezas de hasta 80 toneladas.
A su vez, la demanda se va a incrementar muchísimo, por lo que tendremos que invertir en capacidad. Es cierto que, debido a las dimensiones de nuestras piezas, nos enfrentamos a problemas logísticos, tanto de llegada a los puertos como luego a los parques eólicos, que estamos solventando. Hay que destacar que exportamos el 75% de nuestra producción.