Radar Bonjour LOZA MARINA
NEOARTESANOS
Nostálgica y nada futurista. Ese es el 50% del ADN de Bonjour, la firma de cerámica de Elena Meseguer. “El resto es la influencia del trabajo de alfareros de la Provenza y la Toscana, de las Baleares y la Costa Brava”, dice esta expublicista madrileña que hace tres años se reinventó. “Hacemos cada objeto de principio a fin con las manos, siempre usando colores neutros y empolvados, dejando nuestras huellas. Son irregulares, rústicos y frágiles”, explica sobre sus vajillas, macetas, cuencos y una lámpara, la Picassiana, que en poco tiempo han alcanzado mercados como Francia, Italia, Alemania, Reino Unido y Portugal. “Queremos industrializarnos, pero sin cambiar el método. En ocasiones hay lista de espera, pero nuestros clientes entienden el oficio”. El horno no sabe de prisas. somosbonjour.es