ABIGAIL AHERN
La interiorista británica propone refrescar la casa con tejidos ligeros, jardines interiores y buen olfato.
1. COLOR SILVESTRE. Pinta las paredes de tonos oscuros como frambuesa, arándano o mora, incluso atrévete a cubrir un mueble antiguo del mismo tono. 2. SIN UN PELO. Esconde las alfombras de pelo largo y los terciopelos y sustitúyelos por linos, algodones y sedas. 3. NARIZ FRESCA. Guarda los candelabros y usa velas perfumadas con aromas de vetiver o lavanda junto a jarrones llenos de flores como las lilas. 4. NOCHES BLANCAS. Los días son más largos, pero aún así, podemos prolongar la luz del atardecer con lámparas indirectas y chandeliers de materiales sorprendentes. 5. JARDÍN INTERIOR. Las tumbonas de rafia o bambú son perfectas para las habitaciones, mejor si junto a ellas llenas una estantería o una cómoda de cactus o crasas. 6. BUENA POSE. Me gustan las fotografías gigantes en blanco y negro que, al ser un foco de atención, modifican el conjunto de un espacio. 7. ORDEN VISUAL. Superpón alfombras coloridas creando un nuevo camino por el que moverse en la habitación. Todo se redescubre al verlo desde otro prisma. www.abigailahern.com
Saca velas perfumadas con aroma a vetiver y llena jarrones de lilas Juega a superponer distintas alfombras y añade algodones, linos y sedas