GENERACIÓN CRAFT El Loewe Craft Prize reúne talento hecho a mano de todo el planeta. Estos son algunos de sus finalistas.
La madera, el cristal o el barro alcanzan en sus manos una dimensión artística. Sus propuestas, con las que innovan desde la tradición, les han convertido en los finalistas al próximo Loewe Craft Prize.
Las musas han debido de estar ocupadísimas, solo hay que ver las 1.900 obras llegadas de 86 países que se han presentado en la segunda edición Loewe Craft Prize, que se falla en mayo en Londres. “La artesanía es la esencia de nuestra firma. Nos interesa en el sentido más puro de la palabra. En ella se basa nuestra modernidad, y por tanto siempre será relevante para nosotros”, explica Jonathan Anderson, su director creativo. Este premio lo creó Loewe en 2016 con la intención de poner en valor lo hecho a mano en la cultura contemporánea y reconocer el trabajo de artistas cuyo talento, visión y voluntad innovadora influirán en el futuro, un planteamiento que tiene mucho que ver con los orígenes de la marca, que nació en 1846 como un colectivo artesanal. Para esta edición, once expertos se han reunido en Madrid durante dos días para seleccionar a los 30 finalistas. Algunos de ellos desvelaron su opinión sobre los participantes, como la ceramista Sara Flynn, a quien fascinó Waterwork I, el trabajo de su colega, la irlandesa Deirdre Mcloughlin. “Es una escultura innovadora con una bellísima expresión del volu-
men y con la que demuestra una gran afinidad con el material”. O el artista multimedia Ori Kleiner, a quien le sedujo el banco de madera perforada del norteamericano Julian Watts. “Es muy atractivo, las cavidades que adornan su cuerpo lo hacen dinámico e invita sus usuarios a interactuar”. O el diseñador de muebles Axel Kufus, quien quedó impactado por Singularity, la constelación de lanzas del norteamericano Christopher Kurtz. “Es un juego peligroso y elegante. Te enamoras inmediatamente de esas varas de madera extremadamente puntiagudas, son como seres a los que no puedes abrazar”. Todas ellas estarán en el Design Museum de Londres desde el 4 mayo, aunque un día antes el jurado (entre el que está el vencedor de la edición anterior, Ernst Gamperl, junto a Patricia Urquiola, Deyan Sudjic, director del museo, o el propio Jonathan Anderson) hará público el ganador de los 50.000 euros que acompañan este reconocimiento. “Este año la evaluación ha resultado más ardua que el anterior, ya que el nivel era excelente. Las obras escogidas premian el dominio de una maestría tradicional transformadora para la época contemporánea”, dice Anatxu Zabalbescoa, la presidenta, sobre esta “instantánea multigeneracional de la artesanía actual”. loewe.com