GRAN MIRADOR El estudio de arquitectura Saota firma esta mansión racionalista a las afueras de Ciudad del Cabo.
Transparente y racionalista, esta mansión obra del estudio Saota domina desde lo alto Ciudad del Cabo. Aquí la ARQUITECTURA es el plato FUERTE.
“Nos inspiran GRANDES como Le Corbusier o van der Rohe, el RACIONALISMO es nuestro lema estético”. GREG TRUEN
su severa estética exterior recuerda a un refugio nuclear pero una vez dentro es pura luz y transparencia. Construida sobre la ladera de la Table Mountain, en Ciudad del Cabo, la directora de House & Garden South Africa, Liz Morris, y su marido, el arquitecto y socio del estudio Saota, Greg Truen, decidieron crear desde cero una casa de 1.100 m2, algo diametralmente puesto a las granjas de azúcar de estilo colonial donde ambos pasaron su infancia: una mole de hormigón y cristal en la que dominan las transparencias. “Nos inspiran grandes como Le Corbusier o Mies van der Rohe, el racionalismo es nuestro lema estético”, cuenta la pareja. La edificación de este espacio futurista comenzó en 2014 y duró dos veranos. “El planteamiento es local pero contemporáneo, con fuertes referencias al Movimiento Moderno –añade el proyectista–. Lo que más nos gustó a la hora de elegir la ubicación fueron todos los elementos naturales del paisaje. La idea de reemplazar las paredes por grandes cristales surge para experimentar el poder de la perspectiva, así que levantamos el tejado y creamos ambientes diáfanos. ¿El resultado? Cada rincón parece más grande”. Dentro, decidieron invertir el orden lógico colocando parquet en el techo y cemento en el suelo. Dividida en tres alturas diferentes (cada una con acceso propio al jardín), tiene cuatro dormitorios con baño en suite, una biblioteca, un cine y un gimnasio en los que la decoración prevalece sobre el arte. “Mis lugares favoritos no son los que tienen un factor wow! sino aquellos íntimos en los que disfrutar en familia –dice la propietaria–. La decoración es una combinación de periodos y estilos donde los colores conjugan con las texturas naturales del suelo y las paredes. Aprendí a editar y mezclar épocas a través de mi madre, que era una estéta excéntrica”. La mayoría son piezas que han comprado en sus viajes o diseñadas por las dos firmas de interiorismo, Okha y Arrcc, en las que Greg es partícipe. “El espacio refleja lo que hemos vivido y la forma en la que queremos vivir”, concluyen. Aunque todo es nuevo, el alma de esta casa es suma tradición. www.saota.com